Un joven granadino debería ganar un 155% más para poder comprar una casa

La vivienda baja, pero tampoco es para tanto. Muchos pisos nuevos están sin ocupante, pesadilla de los promotores en un mercado que ahora parece de riesgo y la compra de viviendas de segunda mano está en horas bajas. Los créditos hipotecarios no se dan con tanta alegría como hace unos años. Todas esas realidades golpean cada día a posibles compradores de vivienda -últimamente menos-, y hacen que se lo piensen dos veces antes de realizar una de las inversiones más importantes de su vida, un hogar en el que desarrollarla. Cuánto quedará de hipoteca y por cuántos años son preocupaciones que, junto a las tendencias caprichosas del Euríbor, hacen que la decisión se vaya posponiendo. Y cuando encima uno está por debajo de los treinta años y el sueldo es ínfimo, la complicación crece, concretamente un 155%.

El dato procede del informe de 2008 del Observatorio Joven de Vivienda, Objovi, elaborado por el Consejo de la Juventud de España. Y, según las conclusiones del estudio, un joven granadino necesitaría cobrar un 155,17% más de lo que percibe por su trabajo para poder acceder en condiciones dignas a una vivienda libre. Según el Objovi, esas condiciones dignas pasan porque "los euros brutos que deberían ingresar una persona para dedicar el 30% de su renta neta al pago de una hipoteca media de una vivienda libre". Ese porcentaje se considera como "el umbral máximo de endeudamiento que garantiza la viabilidad de un préstamo hipotecario".

Según los cálculos del Observatorio Joven de la Vivienda, un joven granadino tendría que ganar 2.556,05 euros mensuales -cifra que muchos únicamente sueñan con ver- y unos 30.672 euros anuales para acceder en condiciones que eviten la asfixia económica. Cifra que, además, creció un 7,48% durante el último año a pesar de que el precio medio de la vivienda libre bajó en el mismo periodo un 2,2% en la provincia, situándose en 148.320 euros de media para la vivienda libre.

La situación en Granada, sin embargo, no es de las peores de Andalucía, aunque tampoco es que sirva de consuelo. Los jóvenes que en peores condiciones están para poder comprar una vivienda son los malagueños. Allí, las personas de entre 18 a 34 años tendrían que cobrar de media 230,52% veces más de lo que perciben actualmente para cumplir con las condiciones descritas previamente. Los jóvenes gaditanos, por su parte, necesitarían ingresar un 196,53% más, mientras que en Sevilla tendrían que cobrar un 171,25% más. Ya por debajo de la media andaluza -un joven de la comunidad debería percibir un 171,01% más de salario para adquirir una vivienda- estaría Córdoba, donde una persona entre 18 y 34 años debería cobrar un 163,33% para acceder en condiciones normales a una vivienda.

Tras Granada estaría Huelva, donde un joven debería percibir un 147,37% más para poder suscribir una hipoteca razonable; Almería, con un 105,21% en el mismo concepto; y, por último, Jaén, provincia en la que un joven únicamente debería cobrar un 91,96% más.

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