El borrador del nuevo decreto que regula las actividades de ocio en espacios públicos y privados no ha gustado solo a los empresarios turísticos. La normativa, que permitirá a las discotecas y salas de fiestas instalar terrazas con las mismas condiciones y horarios que el resto de establecimientos de hostelería, también devuelve la música a los bares y restaurantes y a la vía pública. Tal y como ya avanzó Granada Hoy, y explicó ayer el director de Justicia e Interior de la Junta, Demetrio Pérez, la actualización de la norma autonómica que data de 2002 permitirá ofrecer música en directo, aunque con un horario limitado, tanto en locales de hostelería como en la calle. Y esto puede suponer el impulso definitivo para que Granada se consagre como "ciudad del rock, ciudad de la música".

Así lo aseguró ayer el alcalde, Paco Cuenca, que tras su encuentro con el director de Justicia e Interior aseguró que el nuevo nomenclator supone "un respaldo definitivo al ámbito cultural" granadino. "La creatividad e incesante actividad musical que se produce en sus calles, locales y nuevos espacios, con un formato singular, requiere de una nueva regulación por parte de las administraciones", indicó Cuenca, que aseguró que el nuevo borrador permitirá "disfrutar de la música", pero siempre garantizando el derecho fundamental de los vecinos al descanso.

De hecho, y ante las suspicacias que pueda generar entre los vecinos un decreto que da más libertad al sector turístico, el Ayuntamiento de Granada ha anunciado que mantendrá desde el próximo lunes encuentros de reflexión y debate del documento con los colectivos a los que afecta, con el objetivo de incorporar las iniciativas o mejoras que estimen oportunas.

Por lo pronto, los vecinos que forman parte del colectivo 'La calle es de todos' ya han mostrado su oposición al borrador de la nueva normativa, asegurando que el documento sólo beneficia a los intereses empresariales y resta más protagonismo si cabe a los vecinos.

Sin embargo, ayer el alcalde aseguró que el borrador, redactado por la Junta de Andalucía a petición del máximo responsable municipal, trata de adaptar una normativa "con más de diez años de vigencia" a las nuevas necesidades sociales y económicas de la ciudad.

Según establece el documento, al que ha tenido acceso este periódico, los bares y restaurantes podrán acoger actuaciones en director hasta las 00:00 horas, algo que ahora solo pueden hacer las discotecas y salas de fiestas. Estas actuaciones estarán permitidas siempre y cuando no necesiten de un camerino, sean de pequeño formato (como un concierto acústico o un monólogo) y acaben en el horario establecido. Además, se establece un límite sonoro de 80 decibelios para estos establecimientos, muy inferior al máximo de 95 decibelios de los bares con música, los 105 de las discotecas, o los 115 de las salas de fiestas.

En el caso de las actuaciones en la vía pública, tendrán el horario que determine la resolución emitida por el municipio para su autorización, sin que en ningún aso se pueda superar la barrera de las 02:00 horas. Dichos horarios serán especialmente restrictivos en el caso de que se usen equipos de reproducción o amplificación sonora.