La huella del doctor Olóriz marca los actos de la Policía
Celebración en la jefatura Festividad de los Santos Ángeles Custodios
Arrebola recuerda la influencia inequívoca que tuvo el granadino en la investigación dactilar. Anima al cuerpo a servir "sin complejos" aunque su labor no sea siempre bien valorada.
La huella de Federico Olóriz, investigador granadino del que se conmemora el centenario de su muerte, ha marcado los actos celebrados este año en la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental con motivo de la festividad de los Santos Ángeles Custodios, patronos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP). Su principal aportación a las labores de la Policía fue establecer el denominado "método Olóriz", cuya base es el estudio de las huellas dactilares, a través de las que tantos criminales han sido y siguen siendo identificados.
Olóriz fue, en palabras del jefe superior de Policía, Francisco Arrebola, "un gigante de la investigación", que tuvo una influencia "inequívoca" en la creación del sistema de identificación dactilar, así como en la creación de los primeros gabinetes dedicados a ello.
Durante su discurso, y tras dar otras interesantes pinceladas históricas sobre la figura del insigne doctor, el jefe superior viajó al presente para destacar que la Policía española es actualmente "un referente" en el plano europeo. No hizo una alusión directa a los últimos acontecimientos protagonizados por el cuerpo debido a la agitación social que se vive en las calles, pero sí subrayó que, "en estos momentos difíciles", en los que "nuestras actuaciones no son siempre bien valoradas, muchas veces por obtener réditos políticos a nuestra costa", el CNP tiene que seguir sirviendo "sin complejos".
En el mismo tono se pronunció en subdelegado del Gobierno en Granada, Santiago Pérez, al reconocer que existe en la sociedad "una crisis de valores que ha resquebrajado el principio de autoridad" en una sociedad donde la opinión pública a veces se muestra incluso "beligerante".
Recordó que la Policía siempre ha destacado por su "alto grado de eficacia y profesionalidad". A ella, como subrayó, hay que agradecer que "Granada sea hoy una ciudad segura y tranquila", con unos bajos índices delictivos.
Pérez quiso poner de relieve en este punto que los agentes del CNP luchan diariamente por "prevenir nuevas conductas delictivas" y en especial las que afectan a sectores de la población especialmente vulnerables, como son los menores, los adolescentes acechados por la droga y otros males en los institutos, los ancianos o las mujeres víctimas de malos tratos.
Otro de los intervinientes fue el profesor Miguel Guirao, presidente del Instituto de Neurociencia y de la comisión 'Año Olóriz', quien hizo un completo recorrido por la biografía del personaje.
La celebración del día de la Policía se inició con una ceremonia religiosa, que tuvo lugar en el Monasterio de San Jerónimo. Los actos oficiales centrales se desarrollaron en una carpa instalada a tal efecto en las instalaciones de la jefatura, en La Palmita, donde se llevó a cabo la tradicional entrega de condecoraciones. También se entregaron los trofeos de las actividades deportivas (campeonato de tiro) y fueron reconocidas distintas instituciones y autoridades, entre ellas el magistrado Antonio Moreno, el fiscal Francisco Hernández o el catedrático Guillermo Orozco.
Uno de los momentos más emotivos se vivió cuando el comisario de mayor edad de la provincia, Miguel Martínez Ruiz, ya jubilado, recogió una placa en agradecimiento a su dilatada trayectoria profesional.
No se olvidó la jefatura de los medios de comunicación. A través del Premio Amigos de la Policía también fue reconocida la periodista Encarna Ximénez de Cisneros, presidenta de la Asociación de la Prensa de Granada, a quien el jefe superior agradeció expresamente su labor profesional y el cariño demostrado hacia el CNP.
La celebración se cerró rindiendo homenaje a los caídos en acto de servicio y, tras el himno nacional, las decenas de invitados a la cita, que contó con una organización excepcional, disfrutaron de una "modesta" copa de vino español ya en el interior de la sede policial.
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