Una comunidad de vecinos "de múltiples nacionalidades y de toda condición laboral, profesional y económica (unos más holgados que otros)", que desde hace décadas forman la Urbanización Monte de los Almendros de Salobreña, han visto, y sufren con frustración, cómo en los últimos años se les ha vinculado a la trama de corrupción del caso Gürtel por culpa de una promoción de viviendas aledaña, la Urbanización Los Alminares, que construyó una de las empresas de la red de Francisco Correa.

"No tenemos ninguna relación con esas viviendas nuevas, porque nuestra urbanización lleva construida 40 o 50 años y en ella vive gente que no tiene nada que ver con los asuntos que aparecen en esa sentencia", explicaba a este periódico el gerente de la Urbanización Monte de los Almendros, Javier Vázquez.

Los planes urbanísticos de Salobreña ubican las casas de la Gürtel en el Monte de los Almendros

El problema que se han encontrado desde que estalló la investigación del caso Gürtel en la Audiencia Nacional y el juez comenzó a indagar sobre esa promoción de 40 viviendas de lujo de Salobreña es que esa urbanización nueva de Los Alminares se encuentra geográficamente en el mismo cerro del Monte de los Almendros, aunque haya cierta distancia entre ellos. De hecho, en la planificación urbanística de esta localidad, aparece el nombre de esa urbanización como emplazamiento de la nueva promoción que desarrolló la empresa de la trama Gürtel, Nuevos Proyectos Inmobiliarios Salobreña SA. De ahí que la documentación sobre este negocio inmobiliario vinculado al blanqueo de capitales especifique que las casas están en la Urbanización Monte de los Almendros.

Los integrantes de la comunidad de vecinos original, donde hay más de 400 parcelas, aseguran que están sufriendo esa confusión que consideran injusta y que está dañando su imagen, porque las conclusiones de la sentencia judicial respecto a esa promoción de viviendas vecina son demoledoras y muy graves. Aseguran que todo esto ha causado "estupor" en la población y "en toda la comarca".

"En el término municipal de Salobreña existen numerosas urbanizaciones y comunidades de propietarios que, algunas de las cuales, sólo comparten su ubicación urbanística (laderas)", pero que no tienen vínculos, como es el caso de estas dos.

La Urbanización Monte de los Almendros tiene un estatus bastante particular dentro del municipio de Salobreña, pues también ostenta la consideración de entidad urbanística colaboradora de conservación. En la práctica, esto significa que gestionan de forma autónoma el suministro de aguas, el saneamiento o la recogida de basuras. Tienen delegadas estas competencias y otras de mantenimiento y conservación por parte del Ayuntamiento de Salobreña.

Es una zona de casas individuales ajardinadas y rodeadas de zonas verdes, donde, según su gerente, viven "profesionales y muchos extranjeros que pretenden vivir en un ambiente tranquilo". A su entender, los dueños de las casas de Los Alminares (la promoción vecina vinculada a la Gürtel) son "un tipo de propietarios muy diferente".

Esas viviendas de lujo que aparecen en la sentencia de la Audiencia Nacional se construyeron hace una década en virtud de un convenio urbanístico firmado en 2004 por el exalcalde del PP de Salobreña, Jesús Avelino, y una de las empresas de la trama Gürtel. Aquel acuerdo permitió a la mercantil levantar esas casas en el enclave que urbanísticamente se denominaba Monte de los Almendros, pero que -según recalcan sus vecinos colindantes- está a "bastante distancia de ellos".

Aquella operación inmobiliaria de Los Alminares, en Salobreña, ha sido clave para demostrar el funcionamiento del dinero negro de la trama, según especifica la reciente sentencia del caso Gürtel.

La construcción de estas viviendas fue promovida por la sociedad Nuevos Proyectos Inmobiliarios Salobreña SA (NPIS), una empresa que aparece en la agenda de Pablo Crespo (condenado por ser el número 2 de la trama de Correa) como el eslabón final de una de las principales ramas de la estructura societaria creada y que estaba dirigida al blanqueo de dinero negro obtenido de forma ilegal.