La infraestructura de supercomputación de la Universidad de Granada ejecuta en doce meses más de 8.800 años de trabajo en ordenador convencional

La Universidad de Granada (UGR) cuenta en la actualidad con dos supercomputadores, bautizados con los granadinísimos nombres de Alhambra y Albaicín. Los dos equipos son el "núcleo principal" de la infraestructura que da soporte a cientos de investigadores y que permiten el desarrollo de cálculos que antes de la irrupción de estas máquinas tardaban años. O décadas. El dato aparece en la memoria académica presentada por la Universidad en el inicio de curso y que hace referencia a la actividad universitaria en el 204/2025. En ese curso "la infraestructura de supercomputación de UGR ha permitido la ejecución de 292.970 programas y simulaciones científicas equivalentes a 8.807 años de CPU en ordenadores convencionales", refleja la memoria.

El servicio de supercomputación de la UGR es una infraestructura científica que, por su capacidad, se antoja como esencial en el "apoyo a la investigación" en la Universidad de Granada. La idea de la institución es incorporar nuevos superequipos, con más potencia, a la par que se actualizan los componentes que ya ha adquirido para adaptarlos a las novedades tecnológicas.

El Albaicín, con un coste de 1,2 millones, fue presentado en febrero de 2022. Permite a los investigadores hacer simulacros o formular hipótesis que con equipos de otras características se veían limitados. El Alhambra, por su parte, presta servicio desde 2013. La supercomputación se entiende, desde el ámbito científico, como decisiva para realizar avances y, por lo tanto, se entiende como una equipación estratégica para una institución como la UGR.

Tal es así que en los presupuestos de la Universidad para este año se establece como una acción dentro del Plan Director que el Vicerrectorado dedicado a esta materia, el de Transformación Digital, tiene la tarea de "desarrollar un plan de financiación con el fin de mantener y ampliar la infraestructura de supercomputación de la UGR".

Las prestaciones que ya ofrecen los dos supercomputadores, Alhambra y Albaicín, han permitido, en este sentido, "la mejora cuantitativa y cualitativa en la investigación universitaria mediante el desarrollo de modelos y simulaciones científicas cada vez más precisos y complejos", según se señala en la memoria académica.

Y de esta apuesta se benefician en la actualidad 161 grupos de investigación de Andalucía, de los que 110 son de Granada. En cuanto al número de investigadores, son 630 los que, en toda la región, recurren a estos equipos, de los que 478 pertenecen a la UGR.

Estos grupos han desarrollado 292.970 trabajos durante un año, procesos científicos que suponen en tiempo consumido 8.807 años de CPU, el tiempo que hubiera tardado una unidad de procesamiento en hacer el mismo servicio.

En los próximos años la UGR deberá abordar la preparación para infraestructuras que den soporte a nuevos grupos de investigación y a entornos como el UGR Dones, el edificio científico de la Universidad que se sitúa junto al acelerador de partículas de Escúzar y que abordará proyectos relacionados con el desarrollo de nuevos materiales con aplicaciones en ámbitos tan diversos como la ingeniería aeroespacial o la salud.