Los inventores del pionono inician la expansión a través de franquicias
Pastelerías Ysla, con más de 116 años de historia, pone en marcha una nueva línea de negocio para tener presencia en todo el país
Con el objetivo de expandir el pionono y demás productos de elaboración propia por Andalucía y el resto del país, la empresa santaferina Pastelerías Ysla presentó ayer su nueva línea de negocio. Se trata de las franquicias Ysla, un modelo con el que pretende seguir creciendo tras más de 116 años endulzando la vida de los granadinos.
La quinta generación de los pasteleros proveedores, entre otros, de la Casa Real, ha optado por la franquicia para superar así los problemas de logística para hacer llegar sus tradicionales piononos y demás productos como helados, pasteles variados y pan fuera de Granada. Esta firma, que desde su creación en 1897 cuenta ya con seis establecimientos propios y tres asociados, pretende de esta forma ampliar su modelo de negocio inicialmente al resto de Andalucía, una línea de expansión que se desarrollará de forma paralela a otras a nivel nacional e internacional. Tal y como reconoció Francisco Flores, responsable de marketing de la empresa, "la idea es contar con cuatro franquicias de aquí a final de año estando prevista para 2015 la expansión por toda Andalucía". Entre otras novedades, pretende sacar productos nuevos al mercado cada tres o cuatro meses y algunos de ellos ya se pudieron probar en la presentación que tuvo lugar en la sede central de la empresa en Santa Fe como tres nuevos sabores del producto estrella, el pionono.
Bajo el eslogan Un futuro pleno de tradición y con la calidad por bandera, todo aquel que esté interesado contará con un negocio de pastelería, panadería, heladería y cafetería combinación que lleva funcionando más de cuarenta años. Con un elevado control de producción en productos que son totalmente artesanales, todo posible franquiciado que esté interesado contará con el total apoyo de esta empresa granadina a nivel de recursos humanos, gestión del local, cursos de formación, reciclaje, tutores personalizados y ayudas financieras. Según Francisco Flores, "formaremos antes, durante y después al franquiciado en todos los aspectos facilitando ayudas económicas gracias a los acuerdos que tenemos con entidades que ya trabajan en líneas de ayuda para montar franquicias. Pero sobre todo queremos mantener control exhaustivo de calidad en nuestros productos que está reconocido incluso por la Junta de Andalucía".
El contrato de franquicia tendrá una duración de cinco años y una inversión estimada inicial de 40.000 euros de los cuales, habrá que pagar un canon inicial de 24.000 euros. Entre los requisitos se quiere que las franquicias estén instaladas en un local céntrico con un mínimo de 100 metros cuadrados y entre tres y cinco trabajadores para garantizar así una buena atención al cliente.
El proyecto que inició en 1897 Ceferino Isla dio ayer un nuevo paso, el de la expansión para seguir haciendo la vida más dulce a sus clientes.
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