El Estado inyectará más de 400 millones de capital al grupo BMN

En el momento en el que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) formalice la inyección de capital al grupo BMN, el Estado pasará a ser el accionista principal del banco del que forma parte CajaGranada junto a Caja Murcia, Sa Nostra y Caixa Penedés. Aunque la cifra final exacta de la participación del Estado en el accionariado de la entidad -más del 50%, en cualquier caso-, depende aún de la aprobación del plan de reestructuración por parte de Bruselas y de las auditorías que se realicen a la entidad, fuentes financieras aseguraron ayer a este periódico que la aportación monetaria del Estado se podría situar alrededor de los 400 millones de euros.

Según las mismas fuentes, hasta el último momento la cúpula de BMN había confiado en poder recibir la ayuda estatal a través de los bonos convertibles contingentes ('cocos'), lo que sin duda habría sido una opción "más fácil" para la entidad. En lugar de eso, la Comisión Europea determinó que BMN, al igual que CEISS, tendría que recibir la ayuda a través de una inyección de capital directa del FROB, aunque en un plazo de cinco años el banco podrá convertir la participación pública en privada devolviendo el importe de las ayudas. Una opción que, en todo caso, "dependerá de la coyuntura económica", ya que si en este periodo no remonta la economía, indicaron fuentes financieras, será muy difícil para la entidad poder revertir la entrada del Estado en su accionariado.

En cualquier caso, las fuentes señalan que la fórmula elegida es "una opción intermedia" que ni mucho menos es tan grave como la nacionalización que han sufrido entidades como Bankia, CatalunyaBank, Novacaixagalicia o Banco de Valencia.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, confirmó ayer que tanto BMN como Ceiss serán "nacionalizadas parcialmente cuando reciban las ayudas del rescate bancario de la UE a través del FROB" y explicó que "este es el proceso que estaba perfectamente establecido en el memorándum que firmamos con la Unión". Pero en el caso de BMN, el ministro explicó que "la nacionalización no va a ser completa en absoluto", ya que, entre otras cosas, el banco del que forma parte CajaGranada mantendrá su equipo de gestión, sus marcas y sus obras sociales.

De hecho, estos son los principales "pilares" del dictamen de Bruselas, según el documento que BMN remitió a sus consejeros tras conocer la entrada del Estado en su accionariado. La entidad destaca por encima de todas las cosas que la aportación de capital público "garantiza la continuidad, sostenibilidad y viabilidad" de BMN, ya que aportará "una base de capital estable que deberá transformarse en capital privado en un plazo de cinco años".

Desde BMN insisten en que no se puede hablar ni de intervención ni de nacionalización. "No es comparable a las intervenciones llevadas a cabo en las entidades integradas en el grupo 1, cuyo fin será la profunda transformación o resolución de estas entidades".

Además, desde BMN indican que con la inyección de capital del Estado "se inicia una nueva etapa centrada en la normalidad de la gestión", toda vez que las autoridades europeas "han refrendado el avanzado plan de reestructuración y recapitalización del grupo y la gestión del actual equipo". Según la nota de la entidad, en el caso concreto de CajaGranada "la aprobación de los presupuestos del próximo ejercicio y del Plan Estratégico permitirán a CajaGranada-BMN centrarse en su actividad natural, que no es otra que la intermediación financiera", apoyando a "las familias y a las pymes"