Unos juegos paralímpicos en el patio del colegio

El CEIP Gallego Burín del Zaidín acoge la segunda edición de sus juegos paralímpicos con la presencia del Granada CF Genuine

Luis Landa: "Todos tenemos una habilidad especial"

Un momento de las paraolimpiadas.
Un momento de las paraolimpiadas. / Antonio L. Juárez / PicWild

Antonio lo mismo juega de portero que de central. Anabel siempre está dispuesta a acatar lo que diga el míster. Jorge lo tiene claro, él es defensa izquierdo. José Tomás es delantero pichichi. Cada integrante del Granada CF Genuine tiene su función, o más de una, y todos se empeñan en dar lo mejor en el terreno de juego. El campo de juego este viernes fue el patio del CEIP Gallego Burín del Zaidín, colegio que celebró con la segunda edición de sus propias paralimpiadas el día de las personas con discapacidad.

"Vamos a valorar el esfuerzo que realizan para hacer deporte, que es lo que les gusta", explicó el director del centro, José Manuel González, al alumnado, unos 180 escolares desde primero de Infantil a sexto de Primaria. La bienvenida a los jugadores del Genuine fue, como no podía ser de otra manera, calurosísima en una fría mañana de invierno. Se les hizo el pasillo y los futbolistas, conocedores del protocolo, chocaron las manos a diestro y siniestro.

Jorge fue el encargado, por parte del equipo, de dirigir unas palabras al alumnado. Juegan en la liga Genuine Moeve, que tiene como objetivo la normalización de la práctica del fútbol en personas con discapacidad intelectual, y algunos, no todos puntualizó Jorge, también se desempeñan en la liga Inclusión granadina. Contó que su rutina es entrenar, jugar y estudiar sus oposiciones, como cualquiera. Manolo Torres, el entrenador, agradeció la acogida y confesó que "disfrutar con vosotros es una de las cosas más bonitas de todo el año".

Torres cuenta con una dilatada trayectoria como míster. "He entrenado en muchos sitios y a cada equipo hay que tratarle de una manera diferente". Sabe mejor que nadie las capacidades de sus jugadores y el esfuerzo está en sacar el máximo rendimiento. Enca Jiménez, responsable de la Fundación Granada CF, explicó que el equipo cuenta con unos 75 participantes y dos sedes, Granada y Motril. Un reto, el de sacar adelante esta iniciativa solidaria y comprometida, que tiene volcado a todo el personal. "Me han ofrecido otras cosas, pero esto no lo dejo", aseveró Torres sobre cómo ha calado en él trabajar con estos chicos.

Jugadores y cuerpo técnico, del que también forma parte la preparadora física Prisca Puerta, iban a darlo todo en esta iniciativa escolar. Y es que no cabe para ellos otro calificativo que el que les dedica su entrenador: "Son disfrutones".

Para darle todo el empaque que merecía la cita deportiva y la celebración del día de las personas con discapacidad -que oficialmente es el 3 de diciembre-, en el Gallego Burín se prepararon camisetas y pancartas con el nombre de cada clase. Como requiere el ceremonial paralímpico, se hizo el desfile antes del inicio del partido de fútbol en el que participaron los jugadores del Genuine.

La segunda parte de esta jornada especial y deportiva consistía en una gimkana en la que estaba previsto que se practicaran algunas de las disciplinas deportivas que componen el programa paralímpico, boccia, carrera con guía, penalti ciego o fútbol con balón sonoro, enumera la profesora Lola Juárez. Víctor Pérez, docente, añadió que la actividad de la paralimpiada se ha adaptado a todas las clases. También los de Infantil tuvieron su propia gimkana.

Todos estos deportes ya se han practicado en clase de Educación Física. El objetivo es poner a los escolares en el lugar de personas con discapacidad. Según explica el equipo docente, en el centro se trabaja desde la diversidad. Cuentan con aula específica con alumnado que, en determinadas clases, se integra con el resto del grupo. "Los niños lo tienen interiorizado".

En el día a día se tiene en cuenta que cada uno tiene su propia capacidad y que existen recursos para que se pueda ir de la mano. Juárez incidió en que en el CEIP se trabaja bajo el modelo de Diseño Universal de Aprendizaje, que implica tener el mismo material, pero adaptado a cada alumno. Todos los alumnos reciben todo el material, adaptado y sin adaptación. "El objetivo es bajar las barreras, las arquitectónicas y también las de nuestra cabeza", defendió Juárez.

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