Granada lleva años trabajando por convertirse en una ciudad verde. Hay grandes proyectos ambientales por conseguir plantar más árboles, tener espacios libres bien cuidados y más parques y zonas comunes con las que mejorar la calidad de vida de los granadinos y reducir la contaminación. Pero hay acciones mucho más cercanas que con poco esfuerzo incidirían en ese mismo objetivo e incluso lo facilitarían. ¿Conocen los granadinos los árboles que los rodean? ¿Cómo se llama el ejemplar que tiene en la puerta de su casa o las características de ejemplares históricos con los que se puede ir cruzando en su paseo por la ciudad?

Ese es el objetivo de una iniciativa que el guía de turismo granadino Diego Álvarez Peirú ha propuesto tanto al Ayuntamiento de Granada como a la Universidad de Granada: coordinarse para crear un mapa virtual, una herramienta digital sobre los árboles de la ciudad. 

Según explica a este periódico el propio Álvarez, serviría para conocer el tamaño verde de la ciudad y también los cuidados que necesita la vegetación urbana para que luzca verde y bien presentada. Su iniciativa surgió por casualidad. Tras trabajar en el extranjero varios años, un mes antes de que estallara la pandemia del Covid llegó a Granada y ya se quedó encerrado con el confinamiento. Y aquí sigue. Este tiempo le ha servido para seguir ampliando sus estudios y proponer ideas, que no le faltan ya que tiene mil proyectos en la cabeza para mejorar la ciudad y sobre todo, divulgarla. Un ejemplo: hermanar el empedrado granadino con el portugués.

Así, para el proyecto de fin de curso en un módulo en el Hurtado de Mendoza se dio cuenta de que el jardín que tenía el centro no tenía una clasificación de las plantas y realizó como proyecto un mapa virtual que a día de hoy tiene el centro en funcionamiento y accesible en su web. De hecho, este trabajo se podría extender a todos los centros educativos de Granada para que desde la escuela "se sepan los árboles con los que se crece". Y hay jardines muy interesantes en muchos colegios e institutos. 

Su interés por lo verde le llega tras haber realizado en Portugal un curso sobre arte y botánica para estudiar la relación entre ambas. 

Tras ese trabajo de fin de curso comenzó a explorar la situación de los árboles de Granada y qué tipo de información pública había sobre ellos. "Fui a las empresas que gestionan los jardines de Granada (Eulen y Sorigè) y ambas utilizan el mismo programa, el Qgis, que es el mismo que utilizan por ejemplo los arqueólogos y que permite la geolocalización. Y fui a la Universidad de Granada para ver cómo lo hacen ellos con sus jardines y utilizan el mismo programa. ¿Y por qué no se suma en una sola para tener todos los árboles de Granada juntos?" Una cuestión sencilla pero que hasta ahora no había surgido y que Álvarez quiere poner en marcha.

"Eso sí sería una ciudad verde", asegura. Siguiendo su empeño ha hecho propuestas a Informática de la Universidad y al propio Ayuntamiento para ponerlo en marcha. Además, se podría traducir en distintos idiomas para que lo puedan utilizar los turistas. 

Lo único que haría falta es facilitar el nombre del árbol e introducirlos en este sistema, casar las bases de datos y ponerlo en marcha. 

Porque la importancia histórica de Granada en la botánica o el medio ambiente es amplia y en la mayoría de los casos se desconoce. ¿Sabías que del fruto de la Granada se copió la forma para la corona en tiempos del rey Salomón? ¿O que las Normas Granada, el método de valoración de árboles y arbustos ornamentales, se hicieron aquí? Unas normas que por ejemplo permite conocer que el valor económico de los cuatro árboles históricos de la Plaza del Campillo es de 80.000 euros. 

"Esta propuesta no tendría un coste económico ya que los sistemas ya los utilizan todos los mismos, solo haría falta autorizarlo para que las empresas y la Universidad dejaran los datos de los árboles, en realidad está todo hecho, sólo faltaría la luz verde de Ayuntamiento y UGR", asegura este joven, que se ofrece como coordinador del proyecto y que ya ha mantenido reuniones con las áreas competentes para exponérselo.

Iniciativas como esta no hay. Sí existen app para identificar plantas pero no estos mapas virtuales de acceso libre y gratuito con la información unificada. "Es posible y además se podría enmarcar en las iniciativas verdes que ahora se piden para fondos europeos y se conseguiría una ciudad verde real. La idea es buena y quiero que les llegue", cuenta.