La mitad del colegio de Albuñol se derrumba por una filtración de agua

El colegio Natalio Rivas de Albuñol, con más de 47 años de antigüedad, no aguantó más. Ayer se desplomó la mitad del emblemático edificio histórico. Las primeras impresiones de los técnicos de la Junta de Andalucía achacan a las filtraciones de agua el desmoronamiento de un ala del colegio. Los endebles pilares de adobe no resistieron más y ayer, sobre 10:45 de la mañana, se desplomaron. Afortunadamente no hubo que lamentar desgracias personales puesto que los niños están estos meses de vacaciones.

Poco después de producirse el suceso el alcalde de Albuñol, José Sánchez, alertó de los hechos a la delegada de Educación, Ana Gámez, que se desplazó hasta el lugar para corroborar la gravedad del derrumbe. La Junta de Andalucía está aprovechando el verano para acometer las obras de rehabilitación del colegio Natalio Rivas. El proyecto incluye la construcción de un nuevo pabellón con seis aulas de Infantil, un gimnasio y un nuevo patio de recreo. Esa nueva parte del colegio, que se está construyendo actualmente, no se ha visto afectada tras el desplome del ala del antiguo edificio.

El centro se había quedado pequeño desde hace años, por lo que los 397 niños que dan clase en el centro (112 de Infantil y 285 de Primaria) sufrían desde hace meses problemas de espacio.

El primer proyecto propuesto por la Delegación de Educación contemplaba la construcción de un nuevo colegio en una parcela que ofreció el Ayuntamiento de Albuñol, pero los padres y la comunidad educativa se negaron a que se construyera aquí un colegio apelando al valor histórico del viejo edificio y a la posibilidad de que las características del terreno permitieran que se repitieran las temidas inundaciones que ya sufrió la Rábita.

A expensas de que se reúnan los técnicos de la Junta de Andalucía el próximo lunes, la delegada de Educación reconoció ayer que la opción que cobra más fuerza es el derribo total del edificio y la construcción de uno nuevo en el solar del mítico Natalio Rivas. "La obra nueva continuará su curso sin problemas puesto que no ha sufrido daños tras el desplome y es independiente del antiguo edificio", manifestó la delegada de Educación.

Por otro lado, la responsable de Educación en la provincia recordó que la Delegación está a la espera de que el Ayuntamiento de la capital decida si retira la línea de alta tensión que atraviesa la parcela cedida en Lancha del Genil para construir un nuevo edificio educativo ante la escasez de espacio del actual centro.