"Aquí no vemos patologías, vemos personas"

Aunque existen formas de transmisión más allá de la sexual –como la transmisión por compartir agujas para el consumo de droga o la transferencia a través de padres a hijos–, el VIH es una de las enfermedades a las que se enfrentan desde el Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Clínico San Cecilio, en el PTS, una enfermedad además con una carga aparejada, psicológica y social, que hace más complicado su tratamiento.

Ante esta situación, Andrés Ruiz responde con rotundidad: “Aquí no vemos patologías, vemos personas, con su situación clínica, pero también psicológica y biológica”.

El VIH, al igual que otras ITS, supone una enfermedad que va a llevar aparejada un tratamiento, prosigue el médico del Clínico, pero que en el caso concreto del SIDA llevará también “un estigma personal y social”. Por este motivo, para el año 2030, el objetivo de la Organización Mundial de la Salud es que más del 95% de personas con VIH tengan un tratamiento, pero que al mismo tiempo el porcentaje del estigma social se reduzca al 0, explica Ruiz, que explica que su objetivo como profesional, el cual hace extensivo al resto de la sociedad, es “luchar para quitarle el estigma a todas las enfermedades de transmisión sexual y en particular al VIH”.

Cuando se detecta un posible caso, relata el jefe de Servicio sobre el modus operandi de su unidad, se hace una intervención biopsicosocial en el momento del diagnóstico, con el objetivo de hacer también “el estudio de los contactos” del paciente, para saber quien ha podido contagiarle o, al contrario, a quién ha contagiado.

Tras esto, los médicos se transforman en psicólogos para tratar de “evitar la culpa” del paciente, al tiempo que se hace una valoración de la situación social y psicológica del mismo.

Todo ello gracias a una “relación muy estrecha con los compañeros de salud mental”, que entran en juego de forma precoz para hacer un “abordaje multidisciplinar” al paciente, “en lo clínico, lo biológico y lo psicológico”, ahonda Ruiz.

El sanitario es la cara visible de un equipo formaod por distintos especialistas en este tipo de enfermedades , incluyendo tanto las ITS como el VIH y las enfermedades infecciosas cutáneas (causadas por bacterias, hongos, micobacterias, virus y parásitos) de la población general, además de los efectos secundarios que producen sus tratamientos.

Su trabajo, pese a todo, se complementa con el de otros profesionales, del mismo centro hospitalario, pero también de los centros de salud repartidos por la ciudad, para tratar de frenar esa “epidemia silenciosa”.