La nueva CajaGranada comienza a caminar

Seis meses pasan volando. Medio año ha transcurrido ya desde que Antonio Jara compareció ante los medios en el Hotel Carmen para decir sus primeras palabras como presidente in pectore de CajaGranada. Jara, ex alcalde socialista de Granada, fue la persona elegida por PSOE y PP, que se pusieron de acuerdo al menos para eso, para sustituir a Antonio María Claret al frente de la entidad financiera.

Pero la cosa no quedaba en un mero cambio en la cúpula, sino que la renovación era bastante más profunda. Bajando un escalón, afectaba también a las dos vicepresidencias, que debían cambiar de inquilino, por así decirlo.

La primera será ahora para Luis González Ruiz, ex gerente de Emasagra, propuesto por el PP, que sustituye a Juan Ramón Ferreira y que al cargo de vicepresidente primero que ostentó éste le une ahora el rango de ejecutivo.

La segunda vicepresidencia es para José María de la Torre, propuesto por el PSOE y hasta ahora director del departamento de Economía Financiera de la Universidad de Granada. Sustituye a Francisco Lombardo.

Más abajo, el lío de nombres y cifras. Ochenta de los 160 consejeros tenían que ceder sus puestos. En concreto, los ochenta que representan en la Caja a la Diputación Provincial, la Junta de Andalucía y los ayuntamientos.

Siguen en sus cargos otros ochenta, que representan a los impositores (43), los empleados (24) y a otras instituciones, como sindicatos u organizaciones no gubernamentales (13). Sus mandatos no terminan hasta el año 2013.

También continúan en sus puestos otros cargos ejecutivos. La duración de sus cargos no está sujeta a la misma legislación que en los casos anteriores. Por lo tanto, Ramón Martín continuará como director general y se mantendrán en sus sitios sus cinco directores generales adjuntos, así como los representantes de otros órganos de gerencia.

En esta renovación nada se ha dejado a la improvisación. Todo se pactó de antemano entre los grandes partidos de forma que el PSOE mantuviera su hegemonía. De los ochenta consejeros que serán elegidos hoy en la Asamblea General Constituyente, 43 llegan a propuesta de los socialistas: 12 desde la Junta, 10 desde la Diputación y los otros 21 procedentes de corporaciones locales.

El PP aporta a 31 representantes: 11 propuestos en la Junta, 9 en el organismo provincial y los 11 restantes, de los municipios, cinco de ellos de la capital granadina y los otros de Salobreña, Albolote, Motril, Guadix y Almería.

La tarta la completan cinco consejeros de IU -dos a proposición de la Diputación, otros tantos de los ayuntamientos y uno de la administración autonómico- y un representante del Ayuntamiento de Almuñécar que no es otro que su alcalde, Juan Carlos Benavides, de Convergencia Andaluza.

De esos ochenta consejeros, diez entrarán en el Consejo de Administración -que consta de un total de veinte miembros, lo que significa que renueva exactamente a la mitad- y cinco en la Comisión de Control, a la que le sucede exactamente lo mismo, porque está compuesta por diez personas, la mitad de las cuales deja sus puestos en este proceso de renovación del buque insignia de la economía granadina.

Tanto en el Consejo como en la Comisión también habrá mayoría socialista. En el primero de los órganos habrá diez consejeros propuestos por ese partido, entre ellos nombres conocidos como Pilar Aranda o Elena Martín Vivaldi , por cuatro del PP. Y en el segundo, cinco de los diez consejeros también son nombres aconsejados por la formación socialista. El ex delegado de Cultura de la Junta José Antonio Montilla es uno de ellos.

Hasta ahí los datos políticos, que no son pocos. De los económicos se ha hablado mucho en estos seis meses, y de lo que puede suceder en el periodo de seis años que se inicia hoy mismo, se ha escrito mucho más. Pero nunca está de más recordar las cuestiones más significativos.

Con los datos en la mano, está claro que CajaGranada es hoy una entidad más fuerte que hace ocho años, cuando comenzó el mandato de Antonio María Claret, que en su despedida, la semana pasada, dijo que eso le hacía sentirse "legítimamente orgulloso".

La caja ha ganado en estos años en coeficiente de solvencia (del 9,11 al 13,51%), en recursos propios (de 389 a 1.204 millones de euros) y ajenos (de 4.996 a 12.218) o en inversión crediticia bruta (de 4.516 a 11.078 millones). La situación, en eso coinciden todos los que se van, es ahora bastante mejor que la que se encontraron, y eso les hace ser moderadamente optimistas respecto al futuro inmediato.

Un futuro en el que, pese a la explícita intención del desde hoy máximo dirigente -su ya famoso "fusiones no, gracias"- se seguirá hablando de si CajaGranada está preparada o no para mantener esa "autonomía sin aislamiento" que han promovido tanto el presidente saliente como el entrante. En la economía no conviene adelantar acontecimientos.