La nueva vida de la ciudad GRX

La 'repoblación' de la ciudad GRX salta a la vista. Ya no hay pasillos vacíos, ni mostradores de facturación sin colas. El aeropuerto ha recobrado la vida que le robaron los primeros vueloslow cost, los mismos que en su momento le llevaron a superar los 1,4 millones de pasajeros. Hoy, ya olvidados los peores momentos en los que lo sumió la crisis, el Federico García Lorca puede presumir de una nueva vida que poco a poco se va acercando a la que fue. La pista de vuelos vuelve a ser un continuo ir y venir de aviones -en hora punta pueden verse hasta tres aeronaves dejando o embarcando pasajeros-, la sala de espera apenas tiene asientos libres y los pasillos registran un constante trasiego de viajeros y acompañantes. El aeropuerto, por fin, ha retomado el vuelo.

La llegada de EasyJet, que ha incorporado de forma paulatina tres nuevas rutas internacionales, ha sido el revulsivo que esperaba el aeropuerto para despegar. Porque ya llevaba varios años creciendo -los primeros indicios de recuperación en 2014 se tradujeron en un aumento de pasajeros, a lo que se sumó la llegada de British Airways con su vuelo a Londres-, pero las cifras que está registrando este año no podría explicarse sin el desembargo de la compañía de bajo coste.

A la espera de que Vueling incorpore cuatro nuevos vuelos a finales de año -y de que en 2018 lleguen otros tres vuelos internacionales, como anunció recientemente el presidente de Diputación-, el Federico García Lorca atiende ya 2.366 pasajeros y 34 vuelos diarios, lo que supone un aumento del 15% y del 9,6% respecto a los datos del año pasado. La distancia que marcan estos datos con los que se registraron en 2013, el de menor tráfico para la terminal, es enorme: por aquel entonces se atendieron de media 1.746 viajeros y 29 operaciones.

El aeródromo granadino ha conseguido atraer en los primeros ocho meses del año a 515.179 viajeros, un 14,6% más que en el mismo periodo del año anterior. Además, ha registrado el mejor verano desde el año 2009, con 229.732 pasajeros entre junio y agosto, creciendo en todo momento a un ritmo superior al 20%. Así que no es una cuestión de sensaciones, sino de hechos. "La incorporación de las tres nuevas rutas de EasyJet se ha notado bastante en la 'vida' de esta pequeña ciudad que es el aeropuerto, tanto en el edificio terminal como en el campo de vuelo", asegura la directora del Federico García Lorca, Marta Torres, que apunta que la ruptura de la negativa inercia en la que se había sumido la terminal se ha hecho "aportando valor añadido". Es decir, que no solo se ha mejorado la ocupación de los vuelos -que también-, sino que se han incorporado nuevas rutas y nuevas compañías aéreas.

"No hay mayor motivación que ver nuestro aeropuerto con tanta actividad, con todos los colectivos implicados en la prestación de un buen servicio y tan cerca de alcanzar ese punto de inflexión que tanto ansiábamos", explica la directora. Porque lo mejor es que las perspectivas del aeropuerto son muy halagüeñas. A final de año Granada volverá a volar a París, y mejorará sus conexiones con el norte mediante el nuevo vuelo a Bilbao de Vueling, que también reforzará su oferta con rutas a Palma de Mallorca y Tenerife.

Y el trabajo no para. El objetivo del aeropuerto es captar conexiones con destinos "estratégicos", en los que Aena ha detectado una elevada demanda latente. En esa 'lista' corta se encuentran Reino Unido, Italia, Francia y Alemania, los principales mercados europeos para el destino Granada. La terminal granadina ha conseguido "empezar a compensar un poco la dependencia del tráfico doméstico", y en los ocho primeros meses del año las conexiones internacionales ya han aportado casi un 12% de la actividad, una proporción que supera en 8,5 puntos la que se registró en el mismo periodo del año pasado. La meta todavía está lejos, sobre todo porque las expectativas son muy elevadas. "Pensando en el medio plazo, en que las nuevas rutas internacionales continúen con la buena tendencia que vienen manteniendo y que alguna compañía se anime a incorporar alguna más, un objetivo inicial sería que el tráfico con el extranjero aportase entre un 20 y un 30% de nuestra actividad en cómputo anual", explica Marta Torres, que adelanta que otro mercado con bastante potencial de desarrollo para la terminal granadina es la touroperación.

La posibilidad de que lleguen nuevas compañías desembarquen en el aeropuerto granadino no es ni mucho menos remota. La reconquista de las compañías low cost, un éxito generado tras el trabajo de negociación de la mesa que reúne a las principales instituciones granadinas, podría tener un "efecto llamada" muy beneficioso para el aeropuerto. "El crecimiento del tráfico, los buenos índices de ocupación de los vuelos y otros incentivos, como nuestras competitivas tarifas o el trabajo de promoción que desarrollan las instituciones locales presentes en la Mesa del Aeropuerto, pueden hacer que más compañías aéreas se planteen implantarse o incrementar su actividad", reconoce Torres, que garantiza que desde Aena se está trabajando en ello "con el mismo empeño y la misma ilusión".

El renovado ajetreo aeroportuario no requerirá, sin embargo, cambios en la gestión o ampliación de la infraestructura granadina. La directora del Federico García Lorca recuerda que el edificio terminal tiene capacidad para atender a más de dos millones de pasajeros al año y la pista de vuelos puede acoger hasta 19 operaciones a la hora, por lo que hay "margen de crecimiento más que suficiente".

Además, desde el año 2014 Aena ha realizado numerosas mejoras, enmarcadas en el plan de calidad, que "no solo han incrementado la confortabilidad de la terminal y han mejorado el servicio que se presta, sino que además han permitido optimizar las capacidades operativas" del aeropuerto. Marta Torres explica que en estos momentos está a punto de finalizar la primera fase de actuación para remodelar la zona de facturación, que consistirá en la sustitución de los 14 mostradores existentes por otros con mayores prestaciones (dos de ellos específicamente habilitados para personas con movilidad reducida). Además de estos trabajos, que permitirán que la zona gene en amplitud, se va a mejorar el Sistema de Inspección de Equipajes en Bodega, que tendrá capacidad para procesar 1.200 maletas a la hora. Estos dos proyectos absorberán una inversión conjunta de más de un millón de euros.

En cuanto a la plantilla, de momento está "bien dimensionada". Torres asegura que el aeropuerto dispone de personal suficiente para afrontar el crecimiento a medio plazo. "No hay que perder de vista que estas instalaciones llegaron a tener más de 1,4 millones de pasajeros en 2007 con una plantilla similar", apunta la directora, que recuerda que en cualquier caso Aena, como empresa mayoritariamente pública, está sujeta a la autorización del Ministerio de Hacienda para cualquier operación de ampliación de plantilla. Respecto tal resto de los servicios, el aeropuerto trabajará con las empresas concesionarias para que se vayan adaptando a la nueva era que afronta la terminal.