Lo nuevo y lo antiguo, en las faldas de la Alhambra

Lo nuevo y lo antiguo convergen en un moderno edificio de cristal dentro de un histórico carmen con un palacete del siglo XIX. Pero la novedad no es la arquitectura que lo acoge, sino la cocina que se encuentra dentro, y aquí gana la tradición del estilo gastronómico andaluz, a cargo del catering del grupo de Juan Andrés Morilla, que inaugura próximamente en ese edificio un nuevo espacio para bodas y eventos, el Carmen de Isabela.

Pero la arquitectura también es importante, así como el entorno en el que se encuentra el nuevo espacio de Morilla. Un edificio de cristal con tres plantas, de reciente construcción y con las instalaciones más modernas al servicio de cualquier tipo de evento. Las dos primeras plantas podrán tematizarse a demanda de los clientes; la superior estará dedicada a servir copas y se utilizará como discoteca y sala de presentaciones, aprovechando su insonorización. El restaurante, que abrirá en los próximos días, se situa en la Carretera de la Sierra 13, en las faldas de la Alhambra, un lugar privilegiado.

Con este establecimiento, el grupo de Morilla añade así una propuesta más a sus otros restaurantes que conviven en la ciudad y se complementa con ellos: el AC Marriot Palacio de Santa Paula, y La Marquesa, dentro del hotel boutique Darabenaz, en una almunia nazarí en la Sierra Sur de Granada. Dentro de unos días, el Carmen de Isabela se unirá ofreciendo a sus clientes una nueva opción en este singular entorno de Granada.

El establecimiento, con capacidad para 600 personas, ayudará a superar el número de eventos organizados por el grupo gastronómico, que terminará el año con 150 celebraciones y pretende subir esta cifra, en 2015, a cien eventos más.

Morilla es uno de los chefs andaluces más reconocidos internacionalmente y su grupo gastronómico es uno de los principales de Andalucía. Factura casi tres millones de euros auales y da trabajo a sesenta profesionales. La división Catering de Autor dentro del grupo de Morilla, es la más importante de toda la región. Se enorgullece de una producción artesanal y casera, y de haber desarrollado "su estilo gastronómico propio".