Más de 500 pasajeros se quedan en tierra por la nube del volcán islandés
La alta concentración de cenizas en el nivel de vuelo inferior a los 20.000 pies obligó ayer a clausurar el aeropuerto de Granada a las 17:30 horas y a cancelar siete de los 22 vuelos previstos
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La primera oleada de la nube de ceniza volcánica provocada por la erupción del volcán islandés pasó de puntillas por el aeropuerto Federico García Lorca de Granada y Jaén, ya que sólo provocó algunas cancelaciones esporádicas debido al cierre de otros aeródromos con los que está conectado. Sin embargo, esta vez la nube de ceniza ha llegado al espacio aéreo español y el aeropuerto de Granada no se ha librado de sus efectos. Ayer a las 17:30 horas el Federico García Lorca cerró el tráfico aéreo debido a la alta concentración de cenizas en el nivel de vuelo de cero a 20.000 pies. Según informaron ayer fuentes de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) el cierre del aeropuerto supuso la cancelación de siete de los 22 vuelos previstos con origen o destino en Granada. Así, el cierre del espacio aéreo impidió la llegada al Federico García Lorca de cuatro vuelos procedentes de Madrid y Barcelona y de tres salidas, también con destino a Madrid y Barcelona. A las siete cancelaciones que se produjeron después de las 17:30 horas habría que añadir la dos que se produjeron por la mañana debido al cierre del aeropuerto de Barajas.
Las siete conexiones canceladas iban a ser operadas por Iberia, Vueling y Spanair. Un cálculo aproximado permite aventurar que el cierre del aeródromo de Chauchina dejó en tierra a unos 500 pasajeros que tenían previsto coger alguno de los vuelos que deberían haber partido desde Granada. Según informaron fuentes de Iberia y Vueling -que operaban tres y dos de los vuelos cancelados, respectivamente-, sus dos aviones con destino a Madrid y Barcelona tenían previsto transportar a alrededor de 160 pasajeros cada uno, lo que significa que en conjunto ayer se quedaron en tierras granadinas algo más de 300 clientes de estas dos compañías. Además, estaba previsto que partiera del aeródromo granadino un vuelo más a Madrid operado por Spanair -que no quiso detallar el número de afectados-, al que puede presuponérsele una ocupación similar. Así que, en conjunto y sin contar con los pasajeros que no pudieron llegar a Granada y que se quedaron en los aeropuertos de Barajas y El Prat, el cierre del Federico García Lorca pudo afectar a casi medio millar de personas.
Eso sí, desde Iberia confirmaron que durante todo el día de ayer muchos pasajeros decidieron cancelar su vuelo previamente al cierre del aeropuerto, por lo que la cifra final de afectados directos por el cierre del aeropuerto de Granada puede se algo menor.
El protocolo de las compañías aéreas para afrontar las cancelaciones de vuelos provocadas por la nube de ceniza volcánica ofrece dos posibilidades: reacomodar a los pasajeros de forma gratuita en el próximo vuelo disponible a su conveniencia o reembolsarle el importe del billete adquirido.
Sin embargo, para los pasajeros que no podían esperar Iberia habilitó ayer varios autobuses hasta la capital madrileña, mientras que la compañía aérea Vueling también se mostró dispuesta a ofrecer esta posibilidad si así lo demandaban sus clientes.
Aena, por su parte, recomienda a los pasajeros que se informen del estado de sus vuelos antes de acudir al aeropuerto para evitar colapsos llamando a sus compañías aéreas o al teléfono 902 404 704 o al 91 321 10 00.
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