La llegada de la alta velocidad a la capital granadina supondrá la reordenación de una importante zona de la ciudad, el entorno de la actual estación, que sigue pendiente de cómo será el proyecto final. Se trata de una decisión clave, porque será con las plusvalías del desarrollo urbanístico de los terrenos que queden liberados con lo que se financie parte de la infraestructura ferroviaria y, finalmente, se le dé una nueva fisonomía al entorno, ubicado entre el barrio de Los Pajaritos y Camino de Ronda.

Existen, en un principio, dos opciones, que varían en la instalación o no en la misma estación de lo que se conoce como playa de vías, una zona para el estacionamiento y maniobras de los trenes. En el proyecto de Fomento, esa enorme zona de unos 84.000 metros cuadrados iría bajo una cubierta abovedada cerca de los andenes. Para los responsables municipales es fundamental que ese aparcamiento de trenes esté en un lugar menos céntrico, "más allá de la Circunvalación", apuntó ayer el alcalde Torres Hurtado, que señaló a la madrileña estación de Atocha como modelo a seguir. Este cambio supondría un ahorro estimado de unos 120 millones de euros, además de permitir una zona verde al lado de la estación de unos 50.000 metros cuadrados.

El Ayuntamiento ha calculado que con este cambio -que ayer presentó el alcalde al ministro de Fomento, José Blanco- se ganaría espacio para ese gran parque y un ahorro -ya que no habría que hacer la cubierta proyectada por el arquitecto Rafael Moneo- que le permitiría afrontar con más desahogo su porcentaje en el proyecto. "El Ayuntamiento se queda con los suelos que se liberen cuando se ejecute la operación. A partir de aquí realizaremos nuestra aportación", explicó ayer el alcalde, que incidió en que ni el Ayuntamiento ni el resto de administraciones implicadas en el proyecto -Fomento y Junta- están para grandes dispendios.