Las plazas en apartamentos turísticos, a punto de igualar la oferta hotelera

Si algo ha quedado claro en el año que ha pasado desde que la Junta de Andalucía puso en marcha el decreto de viviendas con fines turísticos es que el sector, que hasta entonces había permanecido en la sombra, tenía que ser regulado. Porque las viviendas turísticas, los apartamentos que se comercializan a través de plataformas P2P (peer-to-peer), han llegado para quedarse. De hecho, la oferta que compone este tipo de alojamiento -reglada o no, ya que el decreto difícilmente puede aflorar por completo una actividad muy lucrativa que muchos propietarios prefieren mantener en la sombra- crece a un ritmo exponencial.

Según el informe Urbantur 2016 elaborado por Exceltur, el año pasado las distintas plataformas digitales (Airbnb, Homeaway, Niumba, Windu, Housetrip, Rentalia, Vacaciones-España y Only Apartments) 'vendieron' 12.196 plazas en viviendas de uso turístico en la capital. El estudio, que reconoce que no ha podido eliminar el efecto de las viviendas que se comercializan en varias plataformas debido a su "opacidad", cifra en 15.067 las plazas hoteleras de la capital, lo que da una idea de la presión que ejercen los apartamentos sobre la oferta tradicional. De momento, los hoteles de la capital apenas ofertan 2.871 plazas hoteleras más que las viviendas P2P, que en el último año han incorporado un 23,8% más de plazas. En 2015, según un estudio específico de la asociación turística, Granada contaba con una oferta de 8.849 plazas en apartamentos.

Con todo, la amenaza que supone esta oferta para el sector tradicional es menos preocupante que la que sufren ciudades como Barcelona o Málaga, donde la oferta en vivienda es mucho más numerosa que la de hoteles urbanos. En Barcelona, paradigma de la explotación turística y en la eclosión de problemas derivados de la masificación, la oferta que suponen las viviendas P2P es un 33,9% superior a la tradicional: 104.630 plazas frente a 78.101. En Málaga, un destino vinculado al turismo de sol y playa, que siempre ha tirado de apartamentos y viviendas de alquiler, el desequilibrio es todavía mayor: sus 24.955 plazas en vivienda duplican las plazas hoteleras de la capital, que se quedan en 10.509.

El estudio de Exceltur indica que esta situación se da también en Alicante, Las Palmas de Gran Canaria, Palma de Mallorca, San Sebastián, Sevilla y Valencia. De momento la oferta hotelera mantiene a raya a la de vivienda en Bilbao, Burgos, Córdoba, Gijón, Granada, La Coruña, León, Madrid, Murcia, Salamanca, Santander, Santiago de Compostela, Valladolid y Zaragoza.

Con todo, y pese a que las viviendas con fines turísticos no hayan superado todavía a la oferta hotelera, Granada es uno de los destinos urbanos con mayor presión turística potencial, ya que arroja una de las cifras más altas en número de plazas por cada mil habitantes. Solo Santiago de Compostela, con 138,38 plazas por cada millar de vecinos, se coloca por delante de la capital, que registra un índice de 124,52. Por encima de cien también se sitúan Barcelona (116,34 ) y San Sebastián (106,54), mientras que destinos como Málaga (66,09), Sevilla (76,37), Madrid (51,92) o Córdoba (44,96) se sitúan en unos parámetros mucho más bajos.

Ante estos datos, Exceltur alerta de los efectos que puede tener la "continua y desbordante incorporación de viviendas a la oferta de alojamientos turístico", que dificulta el acceso a la vivienda al encarecer el parque para venta y alquiler; obstaculiza "la convivencia vecinal"; y genera "un gradual cuestionamiento del turismo por parte de la sociedad local".