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“Esta campaña pretende divulgar las capacidades de los profesionales de la Arquitectura y fomentar la igualdad"

  • Entrevista a Ana Carvajal García, arquitecta y vocal de Tecnología y Sostenibilidad de la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos de Granada

Ana Carvajal García, arquitecta y vocal de Tecnología y Sostenibilidad de la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos de Granada

Ana Carvajal García, arquitecta y vocal de Tecnología y Sostenibilidad de la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos de Granada

La campaña “Necesitas Arquitecto/Necesitas Arquitecta" es la iniciativa que desde el Colegio Oficial de Arquitectos de Granada (COAGranada), se ha lanzado para iniciar un proceso en el que se busca concienciar a la gente de todo lo que un arquitecto es capaz de hacer. La campaña pretende trasladar un mensaje claro y contundente con el objetivo de informar a la sociedad granadina de la importancia de contar con este profesional.

Entrevistamos a la vocal de Tecnología y Sostenibilidad de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Arquitectos de Granada, Ana Carvajal García experta en Arquitectura Medioambiental, Eficiencia Energética, edificios pasivos e integración de la naturaleza en la arquitectura.

-Cuál es su función como vocal en el COAGranada?

Promover todo lo relacionado con la sostenibilidad en el trabajo de nuestros compañeros, ofreciendo cursos de formación específicos para que puedan reciclarse y seguir aprendiendo, actualizándose, ya que el campo de la Sostenibilidad y Eficiencia Energética está en pleno desarrolloy cada día hay innovaciones y cambios en la normativa que hay que aprender.

Entrevista a Ana Carvajal García, arquitecta y vocal de Tecnología y Sostenibilidad de la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos de Granada Entrevista a Ana Carvajal García, arquitecta y vocal de Tecnología y Sostenibilidad de la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos de Granada

Entrevista a Ana Carvajal García, arquitecta y vocal de Tecnología y Sostenibilidad de la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos de Granada

En lo relacionado con el Colegio de Arquitectos como Corporación, queremos dar ejemplo y estamos comprometidos en la aplicación de criterios de Sostenibilidad y de reducción de la Huella de Carbono, de hecho El Colegio de Arquitectos de Granada ha sido el primer Colegio de Arquitectos de España que ha calculado y registrado su Huella de Carbono en el Ministerio de Medio Ambiente, que nos otorgó el Sello de Registro, en la primera fase de Cálculo. Queremos seguir avanzando en este sentido, y ahora estamos en la segunda fase implementando medidas de reducción del consumo energético, por ejemplo con las luminarias o la climatización, y más tarde pasaremos a la tercera fase con el tema de la compensación. Por tanto queremos llevar a cabo esa doble vertiente, fomentando desde el propio Colegio las medidas de sostenibilidad, ofreciendo formación y asesoramiento para que los colegiados puedan ampliar sus conocimientos, estar al día, y seguir avanzando en esos aspectos.

-¿Qué le parece la iniciativa que se ha llevado a cabo desde el COAGranada?

Me parece necesaria, pues en el día a día de nuestro trabajo vemos como el público en general desconoce el amplio abanico de servicios que puede ofrecer un arquitecto, y que están relacionados con el diseño, la arquitectura, el urbanismo, la construcción etc. Los arquitectos tenemos una amplia formación técnica y artística que permite que hagamos un gran edificio, o una reforma pequeña, y cuidar todos los detalles y aspectos técnicos de cada etapa, dándole igual importancia a unos y a otros. Nuestra amplia formación y responsabilidad permite que podamos dar soluciones a imprevistos que se generan en las reformas, cuando a veces no estaba previsto tocar la estructura, pero al hacer la demolición se confirma que sí es preciso tocarla. Nosotros estamos capacitados para ello. También tenemos formación para todo lo relacionado con la eficiencia energética de los edificios, que ahora es tan necesario. Queremos descubrirle al público todo lo que puede hacer un arquitecto, y que no nos sigan viendo de esa forma tan tradicional y estancada, dónde solo se piensa en la redacción de proyectos. Hemos evolucionado mucho, y son muchas las competencias y capacidades que tenemos. Por tanto no sólo nos pueden llamar para construir un edifico, una casa, nos pueden llamar para otras muchas cosas, de mayor o menor entidad, porque como dice la campañaquien puede lo más, puede lo menos."

-¿Por qué cree que hay tanta desinformación por parte de la sociedad acerca de lo que puede hacer un arquitecto o arquitecta?

En parte porque tradicionalmente nuestras anteriores generaciones de arquitectos síque estaban más encaminadas al ejercicio propio de la arquitectura vista desde un punto de vista tradicional; el arquitecto sentado en la mesa de dibujo con su escuadra y cartabón diseñando edificios. Eso hace décadas que cambió. Los nuevos modos de trabajo y las nuevas generaciones de arquitectos hanampliado el abanico de servicios y se han abierto otros campos de trabajo que antes no existían. y en los que queremos también participar. No queremos limitarnos a lo que hacían otras generaciones, el espectro de trabajo es mucho más amplio y las nuevas generaciones estamos preparadas y queremos estar en primera línea para dar esos servicios.

-La campaña utiliza el lenguaje inclusivo ¿Qué se busca con esta inclusión?

Hemos querido utilizar el lenguaje inclusivo para que las mujeres arquitectas que no se identifican con el título “arquitecto” en masculino, se sientan también representado.Creo que nuestra lengua castellana admite la utilización del masculino genérico, (y eso lo dice la RAE, no yo), por tanto, si hablan de “los arquitectos” me siento totalmente representada, y no me ofendo si no dicen también el femenino de “las arquitectas”. Pero esta campaña quiere que todos (y todas) se sientan representados, incluidas las mujeres arquitectas que puedan ser más susceptibles en el uso del lenguaje inclusivo. También los iconos o dibujos de esta campaña, donde se representan mujeres trabajando como arquitectas ayuda a visualizar y normalizar a una mujer en el sector de la construcción, por ejemplo, con un casco en una obra.

-¿Cree que sea una buena oportunidad para normalizar la palabra arquitecta?

Lo importante no es sólo la palabra y su género, sino normalizar que se vea a una arquitecta al frente de un proyecto o incluso de una obra como directora de la misma.

-Tradicionalmente ha sido una profesión asociada al género masculino. Actualmente, ¿ Cuál es la ratio de género en la profesión?

En 1982 la proporción porcentual de alumnos matriculados en las escuelas de Arquitectura era 90-10%. En la inauguración de la Escuela de Arquitectura de Granada en 1993 ese ratio era ya del 50%. Actualmente el número de mujeres matriculadas supera al de hombres en una proporción aproximada de 48-52.

Otra cosa es el ejercicio de la profesión. Hay compañeras que tienen el título, pero no ejercen porque es muy complicado compaginarlo con la vida familiar; en cuanto tienes hijos y formas una familia, se vuelve complicado. Al final las mujeres tenemos esa lucha de responsabilidades como madres y como profesionales, y finalmente si no hay ayuda en la conciliación, es muy difícil o imposible compatibilizarlo. Y muchas de ellas se ven obligadas a renunciar a ejercer su profesión o a aplazarla, por mucho que les guste. Pero eso pasa en muchas profesiones. En eso sí que la conciliación no existe; es muy bonito hablar de arquitecto-arquitecta en lenguaje inclusivo, pero no hacemos cosas en la sociedad para que las arquitectas y cualquier mujer pueda compaginar un trabajo con total libertad y tener la familia que quiera, hasta que eso no llegue, esa igualdad, por mucho que lo pongamos en el género de la palabra, no va a existir.

Otro de los problemas que afectan a la sociedad es el de la actual crisis energética, la cual ha provocado un cambio climático en el mundo y en el que la construcción ha tenido mucha repercusión para acrecentar este daño. Ana Carvajal nos comenta cómo la figura del arquitecto puede ayudar a erradicar este problema.

-¿Qué responsabilidad tiene la construcción en la actual crisis energética y por tanto en el cambio climático?

La edificación es la responsable del 40% del consumo energético, y del 36% de los Gases Efecto Invernadero (GEI) de la Unión Europea. Estos valores, que son muy importantes, nos sitúan a los arquitectos ante una gran responsabilidad en nuestro trabajo diario. Diseñar y calcular edificios de forma eficiente debe ser una premisa a tener en cuenta desde el primer momento en el que un cliente nos hace un encargo. A estos datos de consumo energético, hay que sumarle que la industria de la construcción acapara prácticamente el 50% de todo el material extraído y es responsable de más del 35% de los residuos generados en la UE. Por tanto, todos los materiales que se consumen y los residuos que se generan en una obra deben ser tenidos en cuenta para que su impacto en el frágil equilibrio que tiene en estos momentos el planeta sea el menor posible. Hay que valorar y respetar los recursos limitados, como la arena, el agua, etc. Que por ejemplo se utiliza mucho al hacer el hormigón. Hay que descarbonizar las obras de construcción y hacerlas pensando en el menor impacto posible, la industria cementera por ejemplo está trabajando en ello para conseguir la neutralidad climática en 2050. Por tanto, otra forma de construir sin destrozar el planeta es posible, porque hay tecnología, conocimiento y motivación por parte de muchos técnicos y empresas sensibilizadas con este problema. Hay que emprender ese camino y los arquitectos estamos, por nuestra formación, capacitados para ello.

-Dado el incremento del coste de la energía y especialmente la electricidad, ¿Están los edificios actuales preparados para ahorrar energía?

Por desgracia no. Tenemos un stock de viviendas ineficiente energéticamente que llega al 75% del total, por tanto, el potencial de mejora que presenta el sector de la reforma y rehabilitación energética es enorme. La Unión Europea a través del Pacto Verde Europeo está impulsando lo que se llama Renovation Wave (Ola de Renovación) donde la prioridad está en rehabilitar y reformar nuestros edificios e infraestructuras para hacerlos más eficientes. El objetivo de la UE es, al menos, duplicar los índices de renovación en los próximos diez años. Esto supone que para 2030, 35 millones de edificios podrían haber sido ya renovados y que se podrían crear hasta 160.000 nuevos empleos verdes en el sector de la construcción. Los arquitectos estamos preparados para afrontar este reto en cuanto a la renovación energética de los edificios, y también en cuanto al diseño de nuevos edificios de alta eficiencia energética, también conocidos como edificios de consumo casi nulo (ECCN) o pasivos. Por tanto, estamos preparados para hacerlo tanto en obra nueva como en reforma. El propietario que no invierta en hacer este tipo de reformas estará perdiendo la oportunidad de adaptar su edificio o vivienda al cumplimiento de la normativa europea que vendrá con mayores exigencias en el cumplimiento del ahorro energético de los edificios. Nuestra normativa española o Código Técnico de la Edificación (CTE), ya se ha actualizado recientemente obligando a mejorar las prestaciones de los edificios en eficiencia energética, salud, confort y seguridad de sus usuarios; eso propiciará que el parque edificatorio mejore sustancialmente su aspecto en los próximos años. Por tanto, el que no acometa con rigor un proyecto donde se contemple el ahorro energético seguro y efectivo, tendrá un edificio o una vivienda obsoleta, y se depreciará su precio respecto a los demás edificios o viviendas que sí cumplan y acrediten ese ahorro. Para acreditar estos ahorros, existen numerosas certificaciones energéticas, la más conocida es el CEE, pero también hay otros sellos de eficiencia energética más estrictos como el Passivhaus, o el sello Breeam, Leed, Verde etc. No es tan difícil hacer un Edificio de Consumo casi Nulo, (ECCN) o pasivo; no deja de ser lo que hacían ya nuestros mayores, aprovechando la orientación solar, la naturaleza que nos rodea para sacar el mejor aprovechamiento climático del edificio. Esto es lo que se llama bioclimatismo y se ha enseñado en las Escuelas de Arquitectura desde hace muchos años, pero en las últimas décadas se ha menospreciado y hemos dejado de pensar en esas cuestiones. Es el momento de retomar con fuerza este método tradicional de construir aprovechando lo que nos brinda la naturaleza gratis. Y no al revés, e invertir en costosos sistemas de climatización que consumen mucho y son insostenibles.

-¿Qué se puede o debe hacer para cambiar? ¿Están los arquitectos preparados para ello?

Pues repensar la arquitectura desde este punto de vista medioambiental, respetar a la naturaleza y los recursos limitados que estamos esquilmando. Aprovechar cada kw que nos proporcionan las energías renovables; el sol, el agua, el viento son gratuitas e inagotables; en definitiva, pensar que este planeta está enfermo, y en decadencia, y, o nos ponemos manos a la obra o no frenamos la inercia destructiva en la que estamos inmersos como civilización. Los arquitectos debemos asumir esta responsabilidad en nuestro trabajo diario, y formarnos día a día en ofrecer el mejor servicio para que redunde en beneficio del cliente, su confort, su gasto, en definitiva, su vida, y esto repercuta en beneficio del planeta.El Colegio de Arquitectos tiene una gran oferta de formación en este sentido para que los arquitectos puedan reciclarse y ponerse al día en todos estos retos que nos plantea la arquitectura y la construcción del futuro.