Las residencias universitarias de Granada, de las más caras del país

Vivir en una residencia o colegio mayor cuesta a los universitarios que cursan sus estudios en Granada más que a sus compañeros del resto de capitales andaluzas y de ciudades de prestigio universitario como Santiago de Compostela, Salamanca, Pamplona, Oviedo o Valencia. El desembolso supera en cualquier opción de habitación y pensión los 600 euros mensuales. Sólo es más caro el alojamiento para universitarios en Madrid, Barcelona y San Sebastián, según el último estudio realizado por Consumer Eroski sobre el precio de las residencias universitarias y colegios mayores, en el que han analizado 86 centros en 18 ciudades, entre ellos cuatro de Granada. En el estudio han incluido tanto residencias públicas como privadas (no acceden a publicar sus nombres), en las que se hacían pasar por clientes interesados. En Granada, han sido tres de titularidad privada y una pública.

El precio medio para alojarse en la capital oscila entre los 640 y los 714 euros al mes, según la modalidad de residencia, aunque en todos los casos supera la media de las 18 capitales analizadas. A nivel nacional, el coste mensual va de los 230 euros de Sevilla a los 1.400 de Madrid y Barcelona, las ciudades más caras.

Lo más barato en Granada es alojarse en una habitación doble con baño y media pensión, que cuesta 640 euros al mes. Tener lujos como una habitación individual con baño completo y disfrutar de pensión completa ya se sube a unos 700 u 800 euros.

Pero el estudio no recoge sólo la cuestión económica. Se han analizado la información, la accesibilidad, la limpieza, la seguridad y los servicios. En todo, la media de Granada no consigue superar el "aceptable", aunque coincide con la media nacional.

Lo peor valorado es la accesibilidad, que obtiene una calificación de "mal" ya que sólo una de las cuatro residencias estudiadas dispone de habitaciones adaptadas. Y, además, con carencias ya que no disponían de suelo antideslizante o persianas automáticas, por ejemplo. Los aseos tampoco están adaptados.

En lo que mejor están las residencias granadinas es en información, donde llegan al "muy bien", pero bajan al "aceptable" en limpieza y en seguridad, donde valoran si hay protocolo de actuación en caso de peligro o elementos de vigilancia. Los servicios (deporte, jardines, lavandería,...), bajan al "regular".