La crisis sanitaria del coronavirus está comenzando a arrojar algunos buenos datos. Después de conocer que en los cuatro hospitales de la provincia comenzaba a relajarse el nivel de presión con la bajada de ingresos de pacientes de Covid-19 desde el pasado lunes, cuando habría menos de 300 camas ocupadas, otro dato refleja un rayo de luz esta vez sobre los profesionales sanitarios contagiados. El Virgen de las Nieves ya tiene a 37 de sus trabajadores que enfermaron de coronavirus de nuevo reincorporados en sus puestos de trabajo y el nuevo San Cecilio otros 36, según fuentes hospitalarias.

Estos son los que contrajeron la enfermedad mientras se encontraban en primera fila de batalla contra el virus y que se vieron inmersos en una doble contienda: la guerra contra el virus y la de la situación de falta de material de protección dada a cuenta gotas desde Sanidad que acusaron los profesionales de la salud granadina agravada especialmente al comienzo de la crisis.

El hospital Virgen de las Nieves cuenta aún con 125 profesionales aislados por coronavirus, un 2,1% del total y el San Cecilio del PTS otros 78, según fuentes hospitalarias. Mientras, las quejas de sindicatos y sanitarios no se han mitigado, denuncian que aquellos que están en mayor riesgo siguen sin contar con la protección adecuada y añaden que los contagios continuarán produciéndose. 

De hecho Granada es la provincia de la comunidad autónoma que acumula más profesionales de sanidad contagiados, dato consecuente con el resto de realidades de este territorio en cuanto a cifras relacionadas con el coronavirus que sitúan a Granada en el top de peores datos de contagios por cada 100.000 habitantes, pese al relajo de las cifras actuales. Con más de 500 profesionales contagiados, la provincia acumula casi una cuarta parte del total andaluz que supera los 2.200 sanitarios que han contraído el virus. 

Estos 73 profesionales recién incorporados a sus puestos han llegado tras sobrepasar lo que parece hasta ahora la peor parte de la pandemia en cuando a estrés hospitalario. Desde que el 1 de abril Granada registrara sus peores datos de hospitalizaciones y muertes con 657 ingresos por Covid-19 en el día del pico máximo ha llovido mucho en cuanto a estabilización de la curva: ahora, con 480 curados en total y solo 10 ingresos nuevos, los hospitales respiran con alivio. El descanso del guerrero. 

El cambio en las bases del juego de los recién incorporados será ahora más que palpable. Aunque el estrés por el contagio del resto permanece, a fecha de hoy quedaron atrás los días en los que solamente se podía hablar de pico de fallecidos, desinfecciones masivas, de planes de contigencia extremos en los centros sanitarios y de colapso de las camas de UCI. Ahora el clima hospitalario se relaja aunque el trabajo por recuperar a los nuevos ingresados así como seguir extremando las medidas de seguridad para aplanar la curva continúen.