Con secador y gomina, otra forma de vivir el 'clásico'

Una tienda de Guadix copió el peinado de sus ídolos a todo el que acudió ataviado con la camiseta del Barcelona o del Real Madrid

Varios niños quisieron salir con el peinado de sus futbolistas favoritos.
Varios niños quisieron salir con el peinado de sus futbolistas favoritos.
Víctor Olivencia Granada

27 de octubre 2013 - 01:00

El fútbol es un espectáculo de masas. El esférico no sólo centra la atención de los que se calzan las botas y los que pagan una entrada para verlo; mueve cada vez a más personas. Si ya se trata de un espectáculo del calibre de una final de Copa del Mundo, una eliminatoria de Liga de Campeones o un 'clásico' entre el Real Madrid y el FC Barcelona, esos efectos se multiplican.

Calles usualmente transitadas por cientos de personas se vacían, los bares y viviendas se llenan de aficionados que se agolpan ante el televisor... En definitiva, el mundo se para. Conscientes de todo ello, un establecimiento de Guadix puso en marcha una curiosa y llamativa iniciativa para festejar, a su manera, el encuentro entre los dos grandes del fútbol español. Romacho Electrohogar fue el protagonista.

Durante la jornada de ayer, la tienda accitana instaló una improvisada peluquería en su local para que todos los que asistieran con la elástica blanca o azulgrana pudiesen salir de la misma con el peinado de cualquier estrella de su equipo. Por extravagante que fuese. La engominada cabellera con las rayas laterales de Cristiano Ronaldo, la atrevida cresta del brasileño Neymar, la rizada melena de Carles Puyol o la pomposa permanente de Marcelo. Si el deseo del hincha era poseer un pelo similar, la de ayer fue la ocasión perfecta.

"Queríamos vivir el 'clásico' más moderno que se recuerda", asegura alegremente Antonio Romacho, gerente de la tienda. Desde luego, a innovación pocos le ganarían. Muchos eran los sorprendidos que, al entrar en el habitual comercio de adquisición de electrodomésticos, se topaban de frente con una habitación repleta de otro tipo de profesionales como los peluqueros.

Y es que, si usted ha creído ver a un tranquilo Benzema paseando por las calles de su localidad o a un sosegado Víctor Valdés sentado en uno de los bancos públicos, no se frote los ojos. No sería raro que se hubiese tratado de un peculiar forofo que muestra la predilección por su ídolo y sus colores de esa manera tan singular.

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