Los 'selfies' contagian los piojos

La moda de los selfies incentiva el contagio de los piojos. No se trata de una exageración. Es una realidad constata cada día. Y en el centro Kids&Nits de Granada, donde nació esta franquicia contra los piojos que está ya en 45 ciudades españolas, lo confirman: "el cambio de hábitos favorece el contagio de los piojos", asegura Charo Montero, fundadora de la franquicia.

Según la experta, los piojos son, tras el resfriado, lo más contagioso. Y los sufren todos por igual. "Ni la edad, ni la clase social, ni el tipo de pelo, ni el color, ni el tinte, ni las mechas, nada contribuye a que se contagien más los piojos o menos", asegura.

El piojo tiene un instinto fuerte de supervivencia. Y el 99% de los contagios son por contacto directo. De cabeza a cabeza. "Nada tampoco de cojines, almohadas, sábanas...", asegura la especialista, que confirma que si hace cinco años, cuando comenzaron su andadura, el público principal eran niños de 4 a 12 años, ahora se ven a muchos "hermano mayores". "Sigue habiendo muchos niños pero también adolescentes, universitarios, madres que realizan la crianza con apego y duermen con sus hijos o se los pegan mucho"... Es difícil que fuera de la cabeza se produzca contagio porque una vez que no hay pelo, pierden fuerza. "Un piojo en una sábana o almohada no nos debe preocupar. Los que preocupan son los que están en el pelo".

Además de los selfies, que al juntar la cabeza hacen que se pueda propagar más los piojos, hay otros cambios de hábitos que ayudan a su difusión. Es el caso de los aires acondicionados o calefacciones. "Con frío y calor se mueren. Y antes jugábamos con frío en invierno y calor en verano. Ahora se está a una temperatura confortable y eso favorece a que haya piojos todo el año". Y ahora, con el calor, no están tan profundos en la cabeza, por lo que los contactos son más rápidos.

Para prevenirlos, se recomienda revisar a los niños una vez a la semana y pasar una liendrera (peine especial) para que si hay algo se arrastre y se elimine. Nada tiene que ver si el pelo está sucio, limpio, se lava más veces o menos. Lo que no debe hacerse, según Montero, es utilizar antes de tiempo las lociones contra los piojos, los productos químicos que se venden contra estos bichitos. Si se usan mal (por ejemplo antes de que el niño tenga y sólo porque algún conocido o en el colegio se hayan detectado) cuando hagan falta realmente no serán efectivos. Mientras, hay champús naturales que bien usados también pueden ayudar.

También en estas fechas hay que tener vigilancia en los campamentos de verano. Porque, como explica la experta, los piojos no llegan con los libros ni se van de vacaciones, por lo que también hay que tener cuidado en esas fechas y revisar antes y después de las actividades veraniegas en el exterior.

En Kids&Nits no utilizan químicos para tratarlos pero en una sesión se puede dejar "limpio" el pelo de piojos. "Primero se utiliza aire impulsado para deshidratar al piojo y a la liendre. Después se realiza un aspirado y por último se pasa, con una lupa potente, una liendrera mechón a mechón para que no quede nada. En una hora están listos", asegura Montero, para la que es muy importante también terminar con el tabú de los piojos. "Si las personas se conciencian habría menos", dice.