Los sindicatos exigen que se fije el juicio por el accidente de la A-7
UGT y CCOO recordaron ayer en el lugar del accidente a los seis fallecidos en 2005 durante las obras de construcción de la autovía a su paso por Almuñécar
Los sindicatos CCOO y UGT recordaron ayer a los seis trabajadores fallecidos en 2005 en el accidente de la A-7 a su paso por Almuñécar. Fueron cinco minutos de silencio, "uno por cada año que ha pasado" desde el triste suceso que terminaron con la colocación de un ramo de flores en el monolito que recuerda el siniestro ocurrido en el noviembre de hace cinco años.
Los representantes sindicales aprovecharon el acto de recuerdo para reclamar una respuesta judicial y que la Administración se implique para resolver con la mayor prontitud posible este accidente laboral en el que fallecieron seis trabajadores.
En un acto celebrado al pie del lugar donde ocurrió el accidente, los sindicatos pidieron al poder judicial la responsabilidad de dar una respuesta a este caso porque "ya se ha excedido el tiempo estipulado" para aclarar lo que ocurrió en Torrecuevas aquel 7 de noviembre de 2005. ¿Cómo se va a saber qué pasó y quiénes fueron los responsables?, se preguntan. Por eso, piden la máxima celeridad posible al no ser "habitual" que casos como el de este accidente no tengan fecha marcada para la celebración del juicio, mientras que otros temas "urbanísticos a los cuatro años ya se están enjuiciando".
Tanto el secretario general de la Federación de la Construcción de UGT, Francisco Ruiz-Ruano, como Francisco Quirós, de CCOO, recordaron que los dos sindicatos se encuentran ejerciendo la acusación particular de este caso y se encuentran a la espera de que el Juzgado de lo penal número uno de Motril marque la fecha de celebración del juicio, algo que no ocurrirá antes de mayo del 2011, fecha en la que ya existen señalizaciones. Ante esta situación, han considerado que cuando la Justicia no cumple con su cometido de forma rápida y eficaz, "pierde su razón de ser".
"La tardanza en un proceso de este calado está rayando la desvergüenza. Se tienen que dar muchas explicaciones y pedir perdón a los muertos y sus familias", dijo Ruiz-Ruano. Por su parte, Quirós consideró "asombroso que después de cinco años los doce imputados no hayan sido declarados culpables".
CCOO, como acusación particular, pide un total de 288 años de cárcel para los doce imputados por seis delitos de homicidio imprudentes, tres de lesiones imprudentes y otros nueve contra a seguridad y salud laboral. Además, pide para cada uno 21 años de inhabilitación y 86.400 euros de multa.
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