Los trabajadores del Metropolitano de Granada han llegado a un acuerdo para firmar un nuevo convenio colectivo, el segundo desde que la infraestructura se puso en marcha en 2017. Este acuerdo supone una importante subida salarial y una amplia mejoría en las condiciones laborales de todos los trabajadores, que será más importante en 2023, donde corregirá la pérdida de poder adquisitivo, la bajada por debajo de las 1.700 horas anuales, una tercera paga anual y unas condiciones laborales y salariales que corrigen las diferencias con el entorno ferroviario dependiente de la Junta de Andalucía.

La firma de este segundo acuerdo colectivo del Metro de Granada ha sido efectuada este miércoles por parte de la empresa gestora del tranvía y de los representantes legales de los trabajadores en la empresa, constituida por mayoría de absoluta por Comisiones Obreras (CCOO). Así se ratifica el preacuerdo alcanzado el pasado mes de mayo, centrado sobre todo en la subida económica que permite la equiparación salarial con el resto de metros andaluces y una amplia mejoría en las condiciones laborales de todas y todos los trabajadores.

El Convenio Colectivo firmado entrará en vigor con efectos económicos del 1 de enero de 2022 con caracter retroactivo, manteniendo su vigencia hasta el 31 de diciembre de 2025, por lo que se aplicarán las condiciones salariales establecidas en el mismo.

Para CCOO, los objetivos estuvieron muy definidos desde el comienzo de la negociación de este convenio, "tan esperado por toda la plantilla". "En numerosas ocasiones hemos denunciado la situación de discriminación y precariedad laboral del personal de Metro Granada respecto al resto de personal trabajador de metro de distintas provincias de Andalucía".

El presente convenio mejora notablemente las condiciones laborales de la plantilla del Metropolitano de Granada, destacando la recogida en el texto acordado de un incremento salarial para los trabajadores que equipara los salarios al resto de suburbanos de la comunidad autónoma, disminuyendo la desigualdad existente.

"Desde CCOO valoramos positivamente la firma del II Convenio Colectivo, fruto de la negociación colectiva, la presión para acabar con la precariedad laboral de la plantilla y el reconocimiento y apoyo de los trabajadores al trabajo de nuestra organización donde las pasadas elecciones celebradas en febrero obtuvimos una representación de ocho delegados de un comité de nueve miembros, lo que ha supuesto, sin duda, un impulso en la negociación de un convenio que ha mejorado las condiciones salariales y los derechos para la plantilla. Seguiremos trabajando para ser un referente ferroviario en Andalucía", han concluido.

Críticas desde CSIF

Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en Granada, sindicato mayoritario en la Función Pública, ha lamentado la aprobación del nuevo convenio colectivo, que no ha suscrito, emitiendo el único voto en contra del texto.

Tras las distintas sesiones celebradas por parte de los sindicatos integrantes de la mesa negociadora, la Central Sindical ha querido someter a referéndum con los trabajadores el texto del nuevo convenio antes de la firma del mismo, si bien la mayoría de la mesa dio por aprobado ayer el texto, que CSIF considera "poco ambicioso e insuficiente".

El sindicato ha alertado que la empresa ha "sobrepasado las líneas rojas" durante la negociación del convenio, imponiendo sus propios puntos en cuanto a contrataciones y cobertura de vacantes, proponiendo turnos con más de 8 horas diarias, obviando la negociación de la antigüedad de los trabajadores y aprobando el complemento de absentismo laboral, "que ni siquiera se ha llevado a la mesa de negociación".

Además, CSIF indica que la empresa se ha opuesto a contemplar la propuesta para las bajas por incapacidad temporal, de modo que además de no completar el salario al cien por cien desde el primer día, tal como propuso el sindicato, si el trabajador no supera el 50% de la jornada se le detraerá el salario completo del día.

En cuanto a mejoras retributivas, CSIF Granada presagia que la propuesta firmada supondrá una pérdida de poder adquisitivo para la plantilla de al menos el 15%, "inaceptable" para el sindicato, ya que se fija una subida salarial en los años 2024 y 2025 de un 2% en cada año sin tener en cuenta los posibles derroteros del IPC para este periodo, previsiblemente superior al 6%.

El sindicato considera que se debería haber ligado la revisión salarial para los próximos tres años de acuerdo al IPC, tal como se ha aprobado en el metro de Málaga, para avanzar hacia la equiparación salarial con el resto de metros andaluces.