Los trajes de flamenca,con las tendencias de moda

Círculos, trapecios, cuadrados... Los trajes de flamenca para este año se rematan con un sensual juego de formas y siluetas que se recrean en una rica paleta de tonalidades. Tonos fríos para una feria de día y el elegante negro para la noche. Y es que el traje de flamenca es el único traje regional que va cambiando con la moda, que se adapta a las tendencias, a lo que se ve en la pasarela, a los tejidos, formas y acabados.

Este año siguen siendo tendencia los trajes cortos por la rodilla para el día, mucho más cómodos y frescos para soportar las altas temperaturas que se alcanzan en el recinto ferial y en el interior de las casetas. En cuanto a formas, sigue predominando el cuerpo sirena, ajustado hasta la cadera o media pierna y con volantes después.

Y para dar cuenta de las tendencias que seguirán cada año, hay incluso hasta un salón de moda específico, el Simof, que se celebra en Sevilla pero que es referente para todos los creadores y tiendas de Andalucía.

Y este año se han visto muchas novedades. Líneas de vestidos canasteros con cortes asimétricos, texturas fluidas como el popelín o las gasas, junto a una paleta cromática basada en colores fríos, además del uso de los encajes y la pasamanería.

También siguen a la moda los tonos pastel en patrones que potencian la belleza de la mujer con una estética delicada basada en el juego de volúmenes y formas. Rosas empolvados, verdes esmeralda y blancos, entre los más vistos.

La variedad sigue con los vestidos inspirados en los años 50 y la estética pin up, que incorpora corsés y pantalones, pero sin dejar a un lado los volantes. Para la noche, la oferta incluye también aperturas estratégicas sensuales.

Los complementos también son importantes en el traje de flamenca. Buenos zapatos, pulseras, pendientes, flores, peinetas y mantoncillos son el complemento ideal a un buen traje de flamenca. Un mismo traje liso y de un único color o dos a lo sumo sin estampados ni estridencias puede cambiar y parecer otro modelo diferente con solo cambiar los complementos de color y las formas de llevarlos. Todo un mundo.