La Universidad de Granada cotejará muestras de ADN para tratar de identificar los bebés hallados en una fosa común en Huelva

Unas 200 personas aportarán su ADN para comprobar si tienen lazos familiares con los restos de unos quince niños localizados en el cementerio de La Soledad de Huelva, dentro de la investigación para aclarar posibles casos de bebés robados y enterrados sin consentimiento ni conocimiento real de sus familias. El encargado de analizar esas muestras de ADN será el Laboratorio de la Universidad de Granada.

Se trata de unos trabajos que se desarrollaron el pasado agosto, que ahora tendrán una segunda parte, con la recogida de muestras de ADN a las personas que han respondido a la llamada de la asociación Bebés Robados Huelva, recogida que se iniciará el próximo lunes.

En sus redes sociales, la presidenta de la asociación, Esperanza Ordeno, ha explicado que este proceso tiene como objetivo el cotejo genético entre los perfiles familiares y los restos recuperados en la fosa común, víctimas de desapariciones forzadas.

La iniciativa supone "un avance crucial en la búsqueda de la verdad y la reparación para centenares de familias onubenses", y se llevará a cabo desde las 17.00 horas del próximo lunes en el centro socal 'La Gota de Leche', espacio cedido por el Ayuntamiento de Huelva desde el inicio de la actividad de la Asociación en 2011, y que ha sido lugar habitual de asambleas y encuentros con las familias.

Está prevista la participación de alrededor de 200 familias, por lo que el proceso se organizará en grupos y se desarrollará en distintos días, dada la imposibilidad logística de llevarlo a cabo en una sola jornada.

El Laboratorio de la Universidad de Granada será el encargado de realizar el cotejo entre las muestras genéticas familiares y los restos que puedan ser identificados tras las exhumaciones.

El pasado agosto se abrieron cinco de las ocho fosas programadas, mientras que el resto se realizará en el verano de 2026, sumando nuevas mediciones en algunas de ellas al haber aparecido, tras el inicio de estos trabajos, nuevos casos de familias que creen que podrían haber sido objeto de robos de bebés, mientras que se excavará en laterales de distintas praderas.

Asimismo, Ornedo ha explicado que en los cementerios de Ayamonte y Moguer también se está estudiando la forma en la que se va a proceder porque "son exhumaciones que no son en fosas comunes, sino en nichos propios".

En el cementerio de La Soledad han aparecido restos óseos de 15 bebés, que abarcan un período temporal "desde algunos que no llegaron a término hasta otros que fallecieron meses después de haber nacido".