Los españoles somos de salir a la calle, de quedar con amigos en los bares y recorrer varios en una tarde/noche. Ahora toca tomarse el vinito o la cervecita en casa. Tras el primer momento de acaparamiento de productos básicos -como papel higiénico- y la posterior normalización de las compras, los españoles empiezan a aumentar su consumo de productos más “caprichosos”, según el análisis semanal que está realizando la firma Gelt, una app de descarga gratuita que ofrece a los usuarios dinero en efectivo cuando incluyen en su lista de la compra los productos que están en sus promociones. Cuenta con 860.000 hogares repartidos por toda España y que compran en supermercados de todas las marcas, con lo cual dispone de una información única para pulsar el estado del gran consumo español.

Los datos obtenidos por Gelt tras analizar las compras en supermercados de toda España demuestran un consumo que coincide con las tendencias de actividad que se pueden percibir a través de las comunicaciones de los ciudadanos en redes sociales, que empiezan a aliviar el encierro organizando "quedadas virtuales" con el apoyo de distintas herramientas: apps o sistemas de videoconferencias que les permiten mantener las relaciones sociales y entretener los momentos de descanso y ocio.

Tras la "compra búnker", los españoles han entrado en la fase de la "compra del capricho".  Según los datos de Gelt, en la última semana de confinamiento los productos cuyo consumo aumenta más: sirven de consuelo, de aperitivo y acompañamiento en los momentos de ocio, tanto conectados con amigos como compartiendo series o televisión en familia. Son ese vino o cerveza que no podemos tomarnos por ahora en un bar. Al igual que pasa con los acompañamientos de estas bebidas: compramos alimentos un poco “de capricho” y/o preparamos pinchos y tapeo más elaborados para compartirlos en familia.

En el caso del vino, sus compras han aumentado un significativo 62,27%. También cerveza y destilados experimentan crecimientos, del 77% y 36% respectivamente. El ticket medio se modera. Después de marcar su pico más alto entre los días 11 y 14 del mes de marzo, retoma los valores previos a la crisis. Es decir, los españoles gastan lo mismo pero van variando el tipo de productos. Las compras se concentran de forma mayoritaria en torno al fin de semana, igual que en los días previos al confinamiento por el coronavirus.

Relajarse en pareja y disfrutar ahora que tenemos tiempo.

Otra buena noticia para el vino es que la lista de trabajadores que podrán salir de casa a partir de este lunes incluye, entre otras actividades esenciales, la agricultura, la producción de alimentos y la fabricación de bebidas, entre las que “con toda probabilidad” se encuentra el vino. Así figura en el borrador de la orden ministerial al que ha tenido acceso el Blog Rioja Alavesa. Dicha publicación señala que hay que acoger la información “con cierta cautela” hasta que el consejo de ministros la confirme. En cualquier caso, nos aventuramos a informar -concluye- que las bodegas que lo deseen podrán seguir funcionando en medio del estado de alarma actual. ”La fabricación de bebidas, el vino entre ellas,  formaría parte de los servicios esenciales, garantizándose el abastecimiento alimentario en los lugares de consumo y el funcionamiento de los centros de producción”. Si esto es así, estaremos abastecidos también el año que viene.