Pocas cualidades valora más un entrenador de un futbolista que su regularidad. Ser constante, uniforme, sin grandes cambios en su rendimiento sobre el terreno de juego es un elemento diferenciador en una plantilla y más, si dicho jugador mantiene una línea durante toda una temporada. Pero que esa forma de actuar la repita en el tiempo es sinónimo de profesionalidad, de cuidarse y, por supuesto, de fortuna al respetarle las lesiones.

En el Granada CF hay un jugador que el próximo domingo, en Reus, cumplirá si nada se tuerce la cifra de 50 encuentros consecutivos en Liga como titular, jugando prácticamente todos los minutos posibles y aportando en muchas facetas del juego. Se trata de Álex Martínez, un tipo que desde que llegó a la entidad presidida por Jiang Lizhang tan sólo se ha perdido dos encuentros oficiales y no de Liga, sino de Copa del Rey. El lateral sevillano, incombustible como el personaje que interpretó Tom Hanks en la película Forrest Gump de 1994, acumula a día de hoy 49 titularidades de manera consecutiva y todo hace indicar que dicha cifra irá en aumento a lo largo del curso pues hasta el momento es una pieza indiscutible para Diego Martínez.

42Era el récord. En Segunda División, Lina disputó de manera seguida 42 partidos seguidos

Además, se da la circunstancia de que apenas se ha perdido 29 minutos en 49 encuentros, una cifra récord en las temporadas que el Granada CF ha disputado en su historia en Segunda División A. Ya la pasada campaña, Iriondo estuvo a su sombra y únicamente disputó el choque de Copa en La Romareda ante el Zaragoza. Este año, eliminados del torneo del 'KO', Adri Castellano tendrá el gran reto de sentar en el banquillo a un futbolista que, además, ve muy pocas cartulinas amarillas por lo que tampoco es sancionado.

El curso pasado fue un fijo para José Luis Oltra, Pedro Morilla y Miguel Ángel Portugal siendo el primero el único que se 'atrevió' a cambiarlo pero siempre cuando el cuadro rojiblanco iba por debajo en el marcador. Así ocurrió en los encuentros ante el Rayo Vallecano, el Córdoba en El Arcángel, el Nàstic y el Oviedo en el último encuentro de Oltra como entrenador. En todos ellos, salvo en Córdoba, no se logró el objetivo de ganar.

Álex Martínez supera así, en partidos jugados de manera consecutiva en la segunda categoría del fútbol español, a un histórico como Manuel Molina García, Lina, el jugador que más veces ha vestido la camiseta rojiblanca. Lina, según dato aportado por el abonado Manolo Martínez, disputó un total de 42 encuentros seguidos como titular. En concreto, actuó de inicio en los cuatro últimos duelos de la temporada 1979/1980, más los 38 de la 1980/1981 pues en aquella época la Segunda estaba compuesta por 20 equipos y no por 22 como en la actualidad.

Pero al margen de los minutos jugados, el futbolista hispalense aporta mucho en varios aspectos del juego. Por ejemplo, en su trayectoria en el Granada CF ha dado una asistencia y anotado tres goles. Todo ello la pasada temporada, siendo dos de los tantos de falta directa, una de sus especialidades.

Su récord de partidos completos sin ser cambiado lo tiene en 26, una cifra complicada de repetir aunque viendo el número de cartulinas amarillas que ha visto hasta el momento (tres, dos únicamente en la 17/18) será por baja forma o bien por lesión la única manera de que se pierda un partido visto lo visto. Una regularidad que lo convirtió en uno de los mejores jugadores en su primera temporada junto a Pierre Kunde.

De Álex, al que le gusta crear buen ambiente en el vestuario, destaca su capacidad ofensiva desdoblando al compañero que tiene por delante para ganar línea de fondo y centrar ante el buen toque de balón que posee. Pero además, defensivamente no suele cometer grandes errores. De hecho, el más grave que se le recuerda lo cometió hace dos jornadas en Riazor frente al Deportivo. Pero, como se suele decir, el mejor escribano echa un borrón. Una pifia ya olvidada.

En total, ha disputado hasta el momento 4.371 minutos de manera consecutiva. Una auténtica barbaridad en el fútbol actual y nada habitual. Sin duda, Álex Martínez es el Forrest Gump rojiblanco, un futbolista incombustible.