La reacción duró el partido del Cádiz. El Granada se vino de vacío de su visita al Betis, que pese a llegar al partido con muchas bajas y dudas ganó por 1-0 con un gol de Isco en el minuto 75.

Hizo méritos el Granada pasa sacar algo positivo, pero el atacante malagueño acabó con su buen plan defensivo y, encima, el VAR anuló un tanto de Matías Arezo que era el del empate. Las líneas tiradas desde la Sala VOR indican una posición antirreglamentaria milimétrica que ni con esas queda clara.

Sin Manafá ni Álvaro en la convocatoria, ambos resolviendo sus salidas de la entidad, Medina apostó en el once por Bruno Méndez para cubrir la baja de Ricard en el lateral diestro, con el polaco Piatkwoski debutando directamente junto a Ignasi Miquel en el centro de la zaga.

Repitieron en el doble pivote Sergio Ruiz y Gonzalo Villar, mientras que el extremo que dejó libre Álvaro fue para Callejón, completando el ataque con Bryan, Uzuni y Lucas Boyé.

El Betis, pese a arrastrar numerosas bajas, formó con un once más que competitivo ante un Granada que salió bien el partido, agresivo y teniendo el balón con Gonzalo Villar al mando.

Tres faltas en dos minutos hicieron los locales, aparte de que Bruno Méndez lesionó a Ayoze en el minuto 12 con una fea entrada en la que dañó su tobillo. Uruguayos marcando el terreno.

La buena salida del Granada pudo haber sido completa si marca el 0-1 en una acción en la que estuvo cerca. Hubo gol anulado a Uzuni por fuera de juego tras fallo de Rui Silva. Tenía que haber acertado de primeras Lucas Boyé, que tenía toda la portería para él tras el fallo del meta.

Con el paso de los minutos se hicieron con el control del juego los verdiblancos, que poco a poco empezaron a acumular llegadas al marco de Batalla, que casi se lesiona solo al chocar con el poste.

La primera llegada del Betis fue en una jugada por la derecha de Luiz Henrique, el mejor del primer tiempo, que no llegó a rematar Willian José.

Había muchas interrupciones y falta de ritmo, lo que no impedía los acercamientos béticos, sobre todo en una infinidad de saques de esquina botados.

En el minuto 23 Batalla evitó el gol ante el tiro de Diao a bocajarro, en otra jugada de Luiz Henrique que fue la más peligrosa del primer tiempo.

Otro cabezazo de Luiz Henrique y un tiro posterior de Guardado no encontraron portería en acciones seguidas del Betis, que quería marcar el primero antes del descanso.

La última llegada del primer tiempo, igual que la primera, fue del Granada. En este caso un eslalon de un poco acertado Bryan que acabó con un flojo tiro a las manos de Rui Silva. Empezó el malagueño en la derecha y después cambió su posición con Callejón, con intrascendencia en el juego de ambos.

En líneas generales, se comportó el Granada en defensa manteniendo a raya al Betis, pero se mostró errático, impreciso y con muy poco mordiente en ataque en el primer tiempo.

Segundo tiempo

La primera ocasión del segundo tiempo, aunque anulada por fuera de juego de Bryan, fue un chutazo de Lucas Boyé que sacó bien arriba Rui Silva.

A renglón seguida, lesión fortuita de Aitor Ruibal que obligó al Betis a agotar su segunda ventana de cambios.

Como en la primera mitad, el Betis empezó a apretar con el paso de los minutos. Un chut de Abner rebotado se marchó fuera por muy poco.

Respondió el Granada con un cabezazo de Bruno Méndez en falta botada por Bryan que se quedó bien Rui Silva, solo inseguro en la primera acción del partido.

Con los dos equipos tratando de golpear, Batalla voló a tirazo lejano de Marc Roca que iba para dentro.

La tuvo Willian José y después Lucas Boyé. El partido no estaba ni mucho menos, pero lo parecía.

Superada la hora de juego entraron al campo Matías Arezo y Gumbau por Callejón y Sergio Ruiz, lo que hizo que pasara a jugar como extremo diestro Uzuni. Difícil un once más ofensivo para buscar el partido.

Batalla se hizo gigante en el minuto 75 ante Isco en una muy buena ocasión del Betis, aunque en el saque de esquina posterior no pudo evitar el gol del malagueño con un fuerte chut desde dentro del área. El balón tocó levemente en Matías Arezo y entró entre las piernas del meta. La jugada que menos parecía iba a acabar en gol, acabó dentro.

La capacidad de reacción del Granada fue buena y Matías Arezo marcó el empate en el minuto 81 tras un pase al espacio de Lucas Boyé con el uruguayo rematando de primeras ante la media salida de Rui Silva. El asistente dio el gol al entender que Pezzella habilitaba a Arezo pero las líneas tiradas en la Sala VOR anularon el tanto por fuera de juego. Milimétrico y con una imagen ofrecida por televisión que no saca de dudas sobre si es o no.

Buscó más pólvora Medina con la entrada del debutante Hongla y de Antonio Puertas por Gonzalo Villar y por Uzuni, aunque ya con muy pocos minutos por delante. Ya en el 90, para jugar los siete minutos de añadido, entró Bruno Méndez por Melendo, por lo que Antonio Puertas acabó como lateral diestro.

La capacidad de reacción del Granada se limitó al gol anulado, ya que no volvió a asomarse al marco de Rui Silva hasta el final del partido, pese a que la última acción del choque fue un cabezazo de Batalla subiendo a rematar un saque de esquina.