El presagió se cumplió. Muchos aficionados pensaban que el Granada no aprovecharía los pinchazos de sus rivales directos. Y así fue. La 'Ponfe' remontó en tres minutos de caraja rojiblanca que salvó Perea.

"Hacer un gol en el descuento cuando lo tenías perdido es ganar un punto, pero haciendo una valoración después del gran número de ocasiones que hemos desperdiciado parece que hemos perdido dos puntos. Si se juegan veinte partidos como el de hoy te vas siempre al descanso con un 3-0”, analizó Paco López.

"El primer gol es a balón parado, nos rematan solos tras perder la marca y el segundo empieza con un desajuste, el ansia nos ha podido tras el gol de la Ponfe, hemos querido remontar antes de asegurar o tener calma”, lamentó el valenciano.

A pesar de la oportunidad perdida este domingo, el técnico rojiblanco quiso quedarse con que "hemos empatado en casa después de la racha que llevábamos y con muchas de ocasiones. En la primera parte nos teníamos que haber ido con una ventaja amplia. El equipo está vivísimo, todavía quedan muchos partidos, todos teníamos mucha ilusión por esta victoria, pero a partir de mañana a pensar en Albacete”.

A pesar de que no queda tiempo para centrarse en el siguiente partido, López aseguró que hay que analizar "lo que hemos hecho bien" y "lo que no hemos hecho tan bien", porque "cada partido es un mundo. Hay que seguir creyendo, tener fe en el equipo", resaltó.

A Paco López le cuestionaron sobre la ausencia de Melendo por segundo partido consecutivo. Lo acahacó a que hoy el plan "era otro", ya que no todos los rivales "nos cierran por dentro, por eso queríamos sorprender por fuera, y el plan, menos el gol, ha salido bien. Él es importante porque nos da cosas que no tenemos", recordó.

Sobre el cambio de Carlos Neva al descanso, el de Silla desveló que "tuvo gastroenteritis el viernes noche, le aplicaron suero" y este domingo por la mañana "dijo que estaba bien, pero al final de la primera parte nos ha dicho que no podía", concluyó.