Entre la niebla y la poca claridad que, en líneas generales, envuelve la temporada actual del Granada CF desde el punto de vista deportivo, aparecen dos luces en forma de canteranos con futuro que están teniendo minutos, y que tiene pinta de que van a contar con más oportunidades en el futuro de forma regular.

Una de esos halos de iluminación se llama Isma Ruiz, al que ya subió al primer equipo en las últimas campañas Diego Martínez, haciéndole debutar en LaLiga Santander, en la Copa del Rey y en la Liga Europa. Ahí es nada. Esta campaña mantiene su progresión y sólo el infortunio de un par de lesiones de rodilla de impiden, por ahora. jugar más.

La otra luz también fue descubierta por Diego y ha encandilado ahora a Robert Moreno. Es Raúl Torrente y ha llegado su hora. Tanto que ha derribado las puertas del primer equipo hasta quedarse al cien por cien en dinámica del mismo y podría ser titular el próximo viernes en Bilbao ante el Athletic.

Ya hizo la pretemporada al completo con el conjunto principal del Granada y dejó muy buenas sensaciones, siendo de los mejores del equipo en los encuentros amistosos disputados, en los que dejó su impronta de central firme, robusto, rápido, que va bien por arriba y que es capaz de jugar el balón desde atrás.

Desde principio de curso entra en las convocatorias de Robert Moreno, aunque desde hace unas semanas su situación ha cambiado a mejor. Ya no baja a jugar con el Recreativo Granada, con el que tiene ficha, cuando la programación de partidos lo permite, sino que se ha quedado del todo con los ‘mayores’ y su importancia en el equipo ha empezado a crecer.

La lesión de Domingos Duarte en el choque ante el Celta le hizo pasar de quinto a cuarto central del equipo. La irregularidad de Luis Abram, sobre todo su actuación en el duelo frente al Getafe, hizo que Raúl Torrente ascendiera en la mente de Moreno de cuarto a tercer central. 

Dos hechos lo certifican: en el encuentro ante el Levante fue él quien entró en los minutos finales en lugar del peruano para reemplazar a Luis Milla; y tras ese partido ya no jugó el domingo con el Recreativo, algo que sí hizo Adri Butzke, que también formó parte de la convocatoria del primer equipo.

Opciones en San Mamés

Rubén Torrecilla, entrenador del Recre, no ha vuelto a verle el pelo desde entonces, ni en partidos ni en entrenamientos, y el pasado domingo contra el Real Madrid se confirmó que Robert opta antes por él que por Luis Abram, al ser el escogido para sustituir al lesionado Víctor Díaz.

Los problemas musculares del capitán, que salvo sorpresa mayúscula no llega al choque de este viernes en San Mamés y habrá que vez si se pierde algún partido más, colocan sobre Raúl Torrente el cartel de teórico titular para formar el centro de la zaga junto a Germán.

Está por ver si el técnico catalán lo ve con la capacidad suficiente, seguramente más mental que futbolística, para meterlo en el once ante un oponente como el Athletic y en un escenario como San Mamés, o prefiere no jugársela y apuesta por la experiencia de Abram.

A la espera de confirmar cuándo pueden volver tanto Víctor Díaz como Domingos Duarte, ya que el luso ha empezado a ejercitarse sobre el verde esta semana y su retorno parece cercano, lo que está claro es que es la hora de un Raúl Torrente que ha llegado para quedarse.

Con un calendario apretado en las próximas semanas, tanto en lo que queda de año como al inicio de 2022, y el inicio de la Copa del Rey a la vuelta de la esquina, seguro que este murciano ya granadinizado de sólo 20 años, vuelve a contar con minutos. Su carrera no ha hecho más que empezar a escribirse.