Robert Moreno dio continuidad a los jugadores de la pasada temporada en su primer once inicial como entrenador del Granada en un partido oficial. Monchu fue el único de los tres fichajes realizados hasta el momento por el club que fue titular en Villarreal.

Parecía que Luis Abram y Bacca también iban a ser de la partida tras aparecer en el once del encuentro de presentación contra el Málaga y estar a buen nivel, pero ambos se quedaron de inicio en el banquillo.

El joven técnico apostó por Germán para acompañar a Domingos Duarte en el centro de la zaga, en la medular por el esperado tridente formado por Gonalons, Monchu y Luis Milla y colocó de ‘9’ a Luis Suárez, con Machís y Antonio Puertas en los extremos.

Completaron el once Aarón en la meta, con Foulquier y Carlos Neva en los laterales. No hubo sorpresa en el esquema elegido, ya que Robert Moreno apostó por el 1-4-1-4-1, que según se mire y a ojos de muchos es un 1-4-3-3. Es el dibujo que ha utilizado durante prácticamente todos los encuentros de la pretemporada y al que le tiene una fe total.

Tampoco sorprendió Unai Emery en el Villarreal, ya que optó por su habitual 1-4-4-2, con sólo dos cambios en relación al once usado el pasado miércoles en la final de la Supercopa de Europa ante el Chelsea: las entradas de Rulli y de Mendi por Asenjo y por Pau Torres en la meta y el centro de la zaga, respectivamente.

Claras señas de identidad

El primer cuarto de hora de partido en el Estadio La Cérámica sirve como un perfecto ejemplo de lo que va a ser el Granada esta campaña.

Desde el inicio presionó muy arriba. Foulquier persiguió a Alberto Moreno casi hasta la frontal del área rival para intentar recuperar el esférico. Esta presión alta provoca que si el rival logra progresar, pueda meter balones a los espacios que dejan atrás los rojiblancos.

De hecho, Dia dispuso de un par de buenas ocasiones al recibir tras buenos desmarques de ruptura en clara posición para marcar. El Villarreal casi marca también en la primera acción que tuvo a balón parado.

Tal y como se vio en pretemporada, el Granada inició el partido tratando de jugar siempre desde atrás. Con Gonalons incrustado entre los centrales y sin apenas pegar pelotazos.

El Villarreal también propuso en todo momento una presión en bloque alto que le costó trabajo superar a los de Moreno, por lo que el paso de los minutos hizo que Aarón mandara varias veces la pelota en largo buscando a Luis Suárez.La mejor ocasión del Granada en el primer tiempo, que llegó cuando más equilibradas estaban las fuerzas en el tramo inicial del encuentro, nació en una recuperación de balón en campo contrario y en una buena llegada desde atrás de Luis Milla.

Estas arrancadas tanto del madrileño como de Monchu para pisar área contraria sorprendiendo al contrario tiene que ser uno de los grandes recursos ofensivos del equipo este curso.

La reanudación

Pese a que el Villarreal dominó de forma clara en el segundo tramo del primer acto, el Granada no varió prácticamente nada en la reanudación. El único cambio que hizo en el descanso, que fue la entrada de Bacca por su compatriota Luis Suárez, fue de punta por punta.

Los rojiblancos, no obstante, estuvieron mejor ubicados sobre el campo, juntándose bien como bloque y no permitiendo que el Villarreal creara ocasiones pese a que mantuvo su dominio en el campo. La segunda sustitución del Granada fue la entrada al campo de Montoro por Luis Milla, que aguantó una hora a un destacado nivel.

El valenciano creció en el partido con el paso de los minutos y, entre otras cosas, provocó la segunda amarilla de Foyth para que el Villarreal jugara en inferioridad numérica en el tramo final del choque.

Machís, en tareas defensivas en el Estadio La Cerámica

Pese a que Bacca y Jorge Molina, que entró por un intrascendente Machís, apenas coincidieron en el campo durante la pretemporada, Robert Moreno junto a ambos a partir del minuto 79, tres antes de que los amarillos se quedaran con diez.

La coincidencia de los dos veteranos atacantes hizo que el Granada se colocara en un poco visto 1-4-4-2, dibujo que ya mantuvo hasta el final, con Gonalons de pivote único en la medular, Antonio Puertas en la derecha muy atento a las subidas del lateral diestro local y mucha libertad de movimientos para Monchu y Montoro.

Últimos relevos

Con la expulsión de Foyth dio el partido un giro de guion, ya que el Granada recuperó la posesión de balón y pudo prolongar sus posesiones más que en el resto del choque.

Como antes le ocurrió al Villarreal, el dominio y las llegadas no se materializaron en goles. Agotó Robert Moreno en la tercera ventana de cambios las dos sustituciones que le quedaban.

Hubo minutos para Víctor Díaz, que se colocó de central sustituyendo a un Germán que firmó una notable actuación, pero que tenía una peligrosa amarilla.

También para Alberto Soro, que se mostró bastante activo tras dejarle su sitio Antonio Puertas, poco vistoso en ataque, aunque enorme en tareas defensivas.

De casi perder durante muchos minutos, a casi ganar al final. Valioso punto en Villarreal para empezar.