La competición en Segunda División se encuentra ya en la segunda vuelta, pero aún queda por delante un buen trecho de campeonato. En concreto, más de un tercio del mismo, que es además el más importante y decisivo.

El Granada CF va a llegar vivo a ese tramo final, seguramente con menos opciones de ascender a Primera de forma directa que otros equipos que marchan por delante en la clasificación, pero metido de lleno en la pugna por estar la próxima campaña en Primera, ya sea con ascenso por quedar entre los dos primeros o consiguiéndolo en la promoción para subir.

El primer gran reto para poder pelear con todas las garantías posibles por regresar a la elite es contar con el mayor número posible de jugadores disponibles. Y en eso está el club, desde el dirigente hasta el médico pasando por el entrenador: en recuperar y buscar munición para lo que queda.

La recuperación de efectivos podrá hacerse visible, si nada se tuerce, en el partido de este sábado por la tarde en el Nuevo Los Cármenes, donde el Granada recibe a un Andorra que está firmando una sensacional temporada y que ya en primera vuelta fue el primer equipo que sacó los colores al Granada de Karanka.

El técnico Paco López podrá contar para el choque con Víctor Meseguer y con Myrto Uzuni, dos jugadores que son claves en sus planes y que han sido baja en los últimos partidos del equipo por lesión.

Meseguer, que ha estado varias semanas ausente por un esguince de tobillo, es fundamental en la medular rojiblanca y su falta ha coincidido con el bajón del equipo en los encuentros más recientes.

Uzuni, que se ha perdido los dos últimos choques por una lesión muscular, es el máximo goleador del Granada esta campaña y ha marcado todos sus goles en el Nuevo Los Cármenes, que es donde el sábado juegan los rojiblancos ante el Andorra.

Este viernes confirmará Paco López en rueda de prensa si están ya ambos al cien por cien y si pueden ser titulares o sólo contar con algunos minutos, aunque el hecho de que estén ejercitándose con el grupo ya es un alivio para todos, especialmente para el técnico.

También el hecho de que futbolista como André Ferreira o Raúl Torrente sigan trabajando con relativa normalidad al mismo ritmo que sus compañeros, lo que quiere decir que en cualquier momento puede volver a contar con minutos. Ellos también forman parte de la recuperación de munición.

De hecho, y si no hay mayores novedades, el lesionado de larga duración Rubén Rochina es el único futbolista rojiblanco que faltará por lesión al choque frente a los andorranos del sábado.

Para este encuentro tampoco está disponible el medio Yann Bodiger, pero es por sanción al tener que cumplir ciclo por acumulación de cinco tarjetas amarillas.

Los nuevos

En cuanto a la búsqueda de nuevo armamento, el club ya ha encontrado arma ofensiva en la figura del senegalés Famara Diedhiou, que desde primeros de esta semana ya se ejercita a las órdenes de Paco López tras convertirse en el primer refuerzo invernal del club, al que llega cedido por el Alanyaspor turco.

Famara, en principio, podrá estar ya en la convocatoria del técnico valenciano para el choque ante el Andorra, aunque habrá que ver su estado de forma después de no haber jugado con su anterior club desde que lo hiciera con Senegal en el pasado Mundial de Catar.

Para satisfacer todas las necesidades que se le observan al equipo y poder tener el mayor y mejor arsenal posible en el tramo decisivo de la temporada, donde se decide todo, la dirección deportiva sigue trabajando para cerrar nuevas incorporaciones antes de que se cierra el plazo de fichajes.

Aparte de Famara, que viene a cubrir el hueco que deja Matías Arezo, cedido al Peñarol uruguayo, el Granada trata de cerrar la incorporación de otro delantero y también la llegada de un centrocampista.

De hecho, la zona medular es en la que más problemas de efectivos ha tenido desde su llegada Paco Lópéz y en la que más ha notado el equipo la ausencia de jugadores, especialmente de Meseguer en estos últimos encuentros.