Noche grande en el Nuevo Los Cármenes. Noche de partido de toda la vida entre Granada CF y Málaga. Noche importante para dos equipos que llegan necesitados, aunque por distintos motivos, al duelo andaluz que cierra desde las nueve de la noche la jornada 29 de LaLiga SmartBank.

Necesita ganar el Granada para no perder comba con la zona de ascenso directo, que ahora tiene a seis puntos, y tienen que hacerlo los necesitados vecinos para mantenerse cerca de los puestos de permanencia, su objetivo tras una temporada para olvidar.

Entra la competición con este partido en su último tercio y cada fallo adquiere ya una trascendencia mucho más grande. Los puntos valen lo mismo, aunque su reflejo en la clasificación es cada vez más definitivo.

El conjunto dirigido por Paco López afronta el encuentro tras empatar en la pasada jornada en el feudo del Huesca (0-0), donde cortó una racha de cuatro victorias consecutivas. Eso le obliga a ganar este lunes al Málaga para seguir a tiro de piedra de los dos primeros clasificados.

Además, los tres puntos le darían cierto desahogo antes de la complicada salida de la siguiente jornada al feudo del Burgos, uno de los más difíciles de la categoría. Después vendrá la Ponferradina y habrá para los granadinos otra salida temible al feudo del Albacete. Por eso, entre otras cosas, lo de hoy es clave.

El Granada llega al partido con el aval que le da jugar ante su público, ya que esta temporada sólo ha cedido dos empates y no conoce la derrota en un Nuevo Los Cármenes donde acumula siete victorias consecutivas.

Por si fuera poco, llevan los nazaríes cinco encuentros seguidos en su feudo sin recibir ningún tanto en contra, algo que intentarán repetir ante un Málaga que viene de golear al Zaragoza y con Rubén Castro, su principal amenaza, en estado de gracia.

Paco López tendrá que hacer frente a la baja del central Miguel Rubio, un jugador clave en sus planes que se lesionó en el pasado partido ante el Huesca y que, además, está sancionado para este encuentro por acumulación de amarillas al provocar una tarjeta cuando ya había sido sustituido por sus problemas físicos.

Novedades

El capitán Víctor Díaz es el que jugador que cuenta con más papeletas para reemplazarlo en el once inicial. De hecho, fue quien lo hizo en El Alcoraz tras su lesión. También tienen opciones de ser el elegido el uruguayo Raúl Cabaco. Con menos cuenta Raúl Torrente, aún sin minutos tras su grave lesión.

El resto del once titular, en principio, será prácticamente el mismo de la pasada jornada, con Joaquín Marín ‘Quini’ como lateral diestro en lugar del también lesionado Ricard Sánchez.

También parecen tener sitio garantizado en el mismo Raúl Fernández, Ignasi Miquel, Carlos Neva, Pol Lozano, Melendo, Callejón, Uzuni y Weissman. La única duda es si en la medular se mantiene el francés Bodiger como acompañante de Pol Lozano o entra otro jugador como Víctor Meseguer o el serbio Njegos Petrovic.

El técnico, aparte de Rubio y Ricard, mantiene las bajas del medio ofensivo Rubén Rochina y del portero portugués André Ferreira, mientras que recupera para el partido al atacante Alberto Soro.

El futbolista maño, con minutos en los seis partidos previos a lesionarse, vuelve a estar disponible tras faltar por un problema muscular a los cuatro últimos encuentros. De inicio ocupará plaza en el banquillo si entra en convocatoria, porque el técnico tendrá que hacer un descarte.

El Málaga, que se encuentra ahora a ocho puntos de los puestos de salvación, después de que el sábado el Racing de Santander le venciera 2-1 al Andorra, tiene otra final, parecida a la de la pasada jornada cuando recibió al Zaragoza.

El rival

La situación es grave a pesar de los cambios que se observaron en el enfrentamiento contra el conjunto aragonés, cuya victoria por 3-0 animó algo más a la afición y jugadores, pero el equipo necesita ganar siete u ocho partidos de los catorce que quedan para que concluya LaLiga, algo que se antoja complicado.

Es así porque solo ha conseguido cinco triunfos en veintiocho encuentros disputados hasta ahora y, a domicilio, es el peor del campeonato, con tan solo una victoria, la obtenida contra el Mirandés (1-3) en la tercera jornada.

Por ello, la visita al Granada no parece la más idónea para puntuar, pese a que el Málaga llega en el mejor momento de la temporada, cinco goles en los últimos dos partidos ante el Albacete y Zaragoza, los mismos que acumuló en los siete anteriores encuentros.

El entrenador del equipo, Sergio Pellicer, recupera a dos piezas importante de la plantilla para la cita del Nuevo Los Cármenes, el defensa argentino Esteban Burgos y el centrocampista Luis Muñoz, que cumplieron sus respectivas sanciones, aunque es previsible que no estén en el once inicial y apueste por los mismos que ganaron al Zaragoza.

Las bajas para el enfrentamiento serán las del delantero argentino Pablo Chavarría y el defensa Unai Bustinza, lesionados.

El once inicial de los malagueños, salvo sorpresa, estará formado por Rubén Yáñez, Delmás, Ramalho, Juande, Cristian, Lago Junior, Genaro, Ndiaye, Febas, Fran Villalba y Rubén Castro.

Pitará el extremeño Hernández Maeso un partido que, pese a jugarse en lunes, ha despertado una gran expectación, por lo que no quedan entradas desde el viernes.

Si no fallan los abonados rojiblancos, habrá lleno en un Nuevo Los Cármenes donde estarán presentes cerca de mil aficionados del Málaga.