El centrocampista Ángel Montoro ha dejado claro que el Granada CF no será un mero convidado de piedra en en el encuentro que jugará el próximo jueves ante un Barcelona que se juega el liderato (Camp Nou, 19:00 horas).

No obstante, el jugador rojiblanco mantiene los pies en el suelo y subraya la dificultad que tiene enfrentarse al conjunto que dirige el técnico holandés Ronald Koeman.

El valenciano asegura que el Granada va a intentar "sacar la victoria" en la Ciudad Condal, algo que, añadió en declaraciones facilitadas por el club rojiblanco, "es lo que hacemos cuando visitamos cualquier campo".

En el Granada ya se ha pasado la página de la derrota sufrida en Sevilla y, según Montoro, "ya estamos pensando en el Barcelona" para afrontar un encuentro que "sabemos que va a ser de muchísima dificultad pero en el que vamos a pelear por todo". El centrocampista del Granada cree que el choque ante los hispalenses fue un buen ejemplo de que su equipo "no se rinde y lo intenta siempre hasta el final".

"Tenemos que quedarnos con las cosas positivas de ese partido. El equipo siguió peleando a pesar de tener un 2-0 en contra", agregó Montoro.

El jugador granadinista también se refirió al extraño final de partido en el Sánchez Pizjuán, cuando el árbitro De Burgos Bengoetxea señaló la conclusión del mismo antes de que se cumpliera el tiempo añadido que había marcado e hizo a los futbolistas volver al césped para disputar el minuto que faltaba: "Fue una sensación un poco rara, no lo había vivido nunca. El árbitro se confundió. Tratamos de generar alguna ocasión en ese minuto, pero no pudimos. Se para todo y luego cuesta arrancar".