Cuando un equipo incorpora a un futbolista siempre lo hace con unas expectativas más o menos concretas. Yan Eteki llegó a Granada desde el Almería haciendo escala en Sevilla y, de momento, ha aterrizado con el pie derecho. El camerunés ha demostrado sus credenciales en cada partido desde su debut ante el Reading y a día de hoy parece imposible que no esté en el once de Diego Martínez para el estreno liguero en La Cerámica.

Casualidad o no, Yan Eteki ha heredado el ‘8’ de San Emeterio, el escudero de Montoro durante la pasada temporada. En Almería definen al medio africano como un futbolista muy serio y profesional pese a su corta edad (21 años). El jugador no ha podido caer mejor en la disciplina rojiblanca.

Yan Eteki en el amistoso ante el Real Valladolid

El centrocampista se ha desempeñado con soltura como acompañante de Montoro en el tradicional 4-2-3-1 de Diego Martínez. Además, respondió con suficiencia el día que el técnico gallego apostó por un 4-3-3 en el que Montoro y Azeez se destapaban más como llegadores al área rival mientras Yan Eteki guardaba la medular del conjunto granadinista.

El camerunés ha mostrado en todos los amistosos su capacidad para abarcar una gran extensión del verde. El jugador es omnipresente durante las tareas de recuperación y mantiene bien las formas para no condicionarse en exceso. La pasada temporada el futbolista disputó 31 encuentros con el Almería en la Liga 1|2|3 sin llegar jamás a ser expulsado. El medio recibió un total de 17 amarillas, pero si un jugador en su posición no recibe tarjetas es que algo está haciendo mal.

Sencillez con el balón

La eficacia en el aspecto defensivo era algo esperado en el fichaje rojiblanco, pero el jugador está mostrándose también ágil en la distribución del jeugo. Yan Eteki no se complica con el cuero en los pies, algo muy importante cuando se ocupa una posición en la que cada pérdida puede ocasionar un susto o un gran disgusto.

En el encuentro ante el Almería, el 4-3-3 planteado por Diego Martínez dio más libertad a Montoro que en otras ocasiones para descolgarse, pues si él subía Azeez y el propio Yan Eteki podían guardar su espalda. En otras ocasiones, fue el ex del Lugo quien llegó al área rival como hizo en la acción que significó el único gol del partido.

Con progresión por delante

La operación con el futbolista camerunés huele a éxito para el Granada pues, a diferencia de San Emeterio, ha llegado traspasado y ya es propiedad del club para las próximas tres temporadas. El Granada tiene un jugador con un gran potencial y con sólo 22 años que cumplirá a finales de este mes. Incorporaciones de este tipo son el modelo a seguir para el club, pues los jugadores con progresión siempre suman y en un hipotético traspaso futuro dan liquidez a las arcas de la entidad.