Decepción en el Recreativo Granada tras perder en casa del Atlético de Madrid B y tener muy cerca el poder puntuar muchas semanas después. Tras una primera parte floja, los goles de Niño y Marco en la prolongación parecían dejar sentenciado el encuentro. Lejos de eso, Van Rijn de cabeza tras córner y Osei Philip, en una de sus numerosas incorporaciones al ataque, lograron la igualada. No supo mantener ese punto los de Milla y Ndiaye volvió a marcar para los de Tevenet. Van Rijn vio la roja directa y cerró así el irregular partido para los rojiblancos.

Las alarmas por las últimas derrotas han saltado en el Recreativo de Granada y es que cuatro partidos consecutivos sin puntuar han hecho que los de Juan Antonio Milla se hayan asentado en los puestos de descenso y la salvación esté ya a cuatro puntos. No es que jugar de visitante se le esté dando bien al filial pero con un punto en seis salidas, puntuar fuera es una asignatura a mejorar.

No tardó el Atlético B en generar peligro ante un Recreativo que saltó al césped con algo de precaución. Con jugadas por bandas, sólo la faltó el acierto de la delantera ante Adri López que impidió que cayese el primer tanto del encuentro. La más clara llegó en el minuto 5 cuando Assane Ndiaye le robó el balón a Clavijo en la frontal del área y, en el mano a mano y con el meta granadino y con la grada cantando gol, disparó raso a las manos de Adri López. Osei Philip se sumó con soltura al ataque, rompiendo entre líneas pero apenas le llegaron balones claros que aprovechasen su velocidad.

Los granadinos se mostraron bien organizados en defensa e impidieron al ‘Atleti’ B jugar con rapidez. Milla le pidió algo más a los suyos en el verde y se forzaron un par de saques de esquinas que hicieron dar un paso atrás a los de Tevenet. Sin embargo, una contra colchonera dejó al aire la endeblez defensiva visitante de la que adolece en las últimas jornadas, ya que una jugada personal de Niño por banda izquierda y tras irse con facilidad de sus marcajes, batió por bajo en el palo corto a Adri López, logrando el primer tanto del encuentro.

La réplica rojiblanca no tardó en llegar con un disparo desde la frontal de Pablo Sáenz que golpeó en Mario Maroto y terminó en córner. A la media hora de partido, en otra jugada personal, esta vez de El Jebari, regateó a tres defensas pero disparó al lateral de la red. En el 37’, otro susto para el ‘Recre’ cuando un disparo de Diego Bri lo despejó muy forzado Van Rijn que casi se introdujo dentro de su propia portería, acabando el cuero en córner. Después de que Julito reclamase penalti por agarrón, el encuentro terminó en su primer acto con un saque de córner botado por Maroto y un cabezazo potente de Marco dejó el 2-0 camino de vestuarios.

Para la segunda parte, Milla optó por sentar a un errático Clavijo por Mario González. El Atleti no parecía conformarse con el 2-0 y una internada por la izquierda de Pablo Pérez la despejó innecesariamente Ibarrondo a córner.

Al Recreativo Granada no le quedaba más que dar un paso adelante en su búsqueda de algún gol que le volviese a meter en el partido. Así, en el minuto 52, un centro que Iturbe con muchos problemas envió a saque de esquina. Del mismo, botado por Pablo Sáenz, Van Rijn remató de cabeza fuerte pero alto. El técnico del filial vio que era el momento de dar algo nuevo en el campo y realizó un doble cambio, sentando a Talaverón y Pablo Sáenz y dando entrada a Carlos Pérez y Eghosa.

En el 56’, un buena jugada de ataque granadino con una apretura de Carlos Pérez a la derecha por donde se incorporó Ibarrondo termino con un centro raso al área que lo atajó por bajo Iturbe. Tres minutos después, una falta directa de Julito en la media luna del área grande obligó a trabajar otra vez el meta rojiblanco, esta vez de puños, despejando el esférico con apuros. Eran los mejores momentos del conjunto granadinista y eso hizo reaccionar a Tevenet, que movió también banquillo con dos cambios a la vez.

Pudo lograr en el 63’ el tercer gol el Atletico B tras un pase en profundidad de Assane Ndiaye a Nabil pero Van Nijn estuvo muy bien para entorpecerle y evitó un disparo cómodo tras pisar área. El propio central catalán fue el protagonista en la siguiente jugada cuando Julito disparó e Iturbe enviaba a córner y del mismo llegó un cabezazo inapelable de Nico Van Nijn al fondo de la red. El delirio llegó a la familia granadina cuando en el 79’, Osei logró el empate para los visitantes al empujar a gol un balón suelto mal despejado por la defensa rojiblanca. Pero no duró mucho la alegría para los de Milla ya que en la siguiente jugada de ataque local, una falta botada por Maroto fue rematada por Marco en el área pequeña y Assane empujó a gol en el segundo palo (3-2). Para colmo de males, un paradón de Iturbe a falta directa de Nils Mortimer en el 96’ terminó con las esperanzas granadinas de sumar.