Isma Ruiz, junto a Juanito y Antonio Fernández Monterrubio, tras renovar hasta 2028 con el Córdoba.
Isma Ruiz, junto a Juanito y Antonio Fernández Monterrubio, tras renovar hasta 2028 con el Córdoba. / El Día de Córdoba

Si hay un jugador en la plantilla del Córdoba que es fundamental para Iván Ania, ese es Isma Ruiz. El técnico cordobesista le dio, hace dos años, galones al centrocampista nacido en Gójar y formado en el Granada CF y éste no le ha decepcionado. El pivote es el futbolista más empleado por el entrenador asturiano y su extensión sobre el terreno de juego.

A sus 24 años, se ha hecho ya un nombre en Segunda División. Es su tercera campaña en la categoría de plata y cada vez tiene más importancia en el esquema cordobesista. Pese a no ser un futbolista aparentemente fuerte para la posición que ocupa en el terreno de juego, tiene el fútbol en la cabeza. Hace muchas cosas bien y gracias a su visión, juega fácil y con criterio. Una perla que, como tantas otras, no tuvo continuidad en el Granada CF y tuvo que buscarse un mejor futuro lejos de la entidad presidida por Sophia Yang.

Nadie duda en tierras cordobesas que el once del cuadro verdiblanco es Ruiz y diez más. Lo ha jugado casi todo y solo se ha perdido tres minutos en la actual temporada. Fue en la primera jornada ante el Sporting de Gijón tras ser sustituido en el minuto 87. Formado en el Granada CF desde alevines, fue subiendo peldaños en la cantera rojiblanca hasta llegar a debutar en el primer equipo con 19 años. Lo hizo en el famoso partido que la LaLiga obligó a jugar en San Sebastián ante la Real Sociedad debido a los positivos en Covid-19 en la plantilla, en una alineación y una convocatoria plagada de canteranos. Ese curso también jugó Copa del Rey ante el San Juan navarro y el Navalcarnero.

Aunque su gran puesta de largo fue en la temporada siguiente ante su público en el triunfo ante el Atlético de Madrid por 2-1 tras remontar el tanto inicial de Joao Félix. Debutó a lo grande como titular, dando mucha continuidad al juego del equipo entonces entrenado por Robert Moreno. Pese a jugar de inicio en dos ocasiones más, ante el Getafe y el Cádiz y contar con minutos residuales, no se terminó de confiar en él y se marchó al curso siguiente cedido al Ibiza en Segunda División. Cumplió contrato y no se contó con él. Pero ha sido en Córdoba donde ha terminado de explotar demostrando su calidad y talento. Recientemente declaró que le gustaría regresar alguna vez al club donde se formó y al que se enfrentará el sábado desde las 21:00 horas.

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