El Granada CF llega a un acuerdo con Rochina

Tras varias semanas de negociaciones sin que se llegase a buen puerto, Granada CF y Rubén Rochina han podido desencallar la operación que llevará al valenciano de regreso al club nazarí por dos temporadas. La entidad granadinista espera presentar a su nueva incorporación en Los Cármenes el próximo lunes 23 de agosto. El de Sagunto, que siempre mostró su predisposición a volver a vestir la elástica horizontal, incluso rebajó sus exigencias salariales para recalar en el equipo.

Oficial

Pese a que su fichaje no fue oficial hasta después del partido, Rochina estuvo presente en uno de los palcos durante el duelo ante el Valencia y Robert Moreno confirmó en rueda de prensa su llegada: “Rochina ya es mío. Lo conozco, lo hizo muy bien cuando estuvo en Granada. Tiene experiencia y viene a sumar y a aportar. Ha hecho un esfuerzo grande para estar con nosotros. Todos los que quieren venir tenían la intención de venir”.

El mediapunta, que hasta la finalización de la pasada campaña militaba en el Levante, se pondrá a disposición del técnico nazarí para apuntalar una plantilla en la que la posición de enganche estaba algo desamparada. También podrá ocupar ambas bandas, situación que se dio con asiduidad en el cuadro levantino y que con seguridad repetirá en Granada tras la baja de Antoñín y los pocos extremos puros con los que cuenta el plantel rojiblanco.

Versátil

En los dos esquemas de inicio usados hasta el momento por Moreno, Rochina podría encajar a la perfección en la posición de interior en un centro del campo con tres jugadores o en banda diestra, a pierna cambiada, en el 1-4-1-4-1 empleado en La Cerámica.

Rubén Rochina es un viejo conocido para la ciudad, pues militó en las filas nazaríes a lo largo de dos temporadas (2014-2015 y 2015-2016) en las que se ganó el cariño de la afición, acumuló 54 partidos, 8 goles y 8 asistencias en la competición liguera.

Su periplo como rojiblanco terminó súbitamente en el mercado estival del año 2016, cuando el pudiente Rubin Kazan ruso pagó ocho millones y medio por hacerse con sus servicios. Cinco campañas después, su vistosa zurda regresa al punto de partida.