Granada CF-Leganés | Crónica

La semana fantástica rojiblanca

  • Un tanto de Antonio Puertas le otorga el cuarto triunfo a los rojiblancos, que ya suman 14 puntos

  • Rui Silva vuelve a dejar su puerta a cero fruto del gran trabajo defensivo

Roberto Soldado abraza a Antonio Puertas tras anotar el tanto del Granada CF.

Roberto Soldado abraza a Antonio Puertas tras anotar el tanto del Granada CF. / Carlos Gil

Sumar siete puntos en tres partidos de una misma semana no está al alcance de muchos equipos. El Granada CF lo logró este sábado en un intenso e igualado duelo ante el Leganés, en el que demostró un día más que da igual el rival que tenga enfrente, pues sabe jugar de distintas maneras y adaptarse a cualquier circunstancia. Los rojiblancos se encuentran en un momento de plena confianza en su juego y eso se palpa sobre verde. El duelo tuvo dos partes bien diferencias, y en ambas, mostró que a la hora de competir este equipo está preparado para todas las guerras. Se sumaron tres nuevos puntos y ya son 14. Una cifra inimaginable que no hace más que corroborar el gran trabajo que están haciendo Diego Martínez y los suyos.

Dominio

El dominio de los rojiblancos fue apabullante durante el primer acto. Dominaron la posesión, tuvieron constantes llegadas, empezando por dentro para terminar centrando desde los flancos y, además, en defensa no pasaron excesivos apuros pese a que el rival actuó con dos referencias ofensivas.

Los rojiblancos dominaron la primera mitad con continuas llegadas al área pepinera y sin pasar apenas por apuros defensivos

La tónica de los cuatro primeros minutos, en los que se llegaron hasta en tres ocasiones claras al área terminando jugadas, se prolongó prácticamente durante toda la primera mitad. Los de Diego Martínez entraron tanto por la derecha como por la izquierdo, generando las duplas Neva-Machís y Víctor Díaz-Antonio Puertas numerosas dudas a la zaga pepinera.

Descomunal Yangel

La iniciativa era rojiblanca en todo momento, con un Yangel Herrera que aparecía por todo el campo y un desgaste de Azeez que casi todo lo que hizo lo ejecutó con acierto. Y a ello se sumó Soldado, que muestra un oficio y una calidad cuando juega de espaldas a portería poco antes visto en Los Cármenes.

Las constantes llegadas no se concretaban, lo que hizo al Leganés se estirase un poco en el ecuador del primer acto, con dos acercamientos al área de Rui Silva. En uno de ellos, el portugués evitó con un paradón el 1-1 en un mano a mano con Braithwaite tras un error de Germán. En el 25’, Soldado reclamó un penalti por mano de Awaziem que impidió al valenciano controlar con más tranquilidad, pero ni Cordero Vega ni el VAR lo estimaron. Sin embargo, en el siguiente ataque del Granada CF llegó el tanto que abrió el marcador y terminaría dándole la victoria.

Gol rojiblanco

Un balón en largo de Domingos Duarte para que lo pelease Soldado, tocó en Omeruo y le quedó en ventaja al ariete rojiblanco, que en vez de golpear, se la cedió Antonio Puertas que, desde unos 25 metros, remató a puerta vacía ante la salida de Soriano. Gol merecido que hizo estallar una vez la instalación del Zaidín.

Carlos Fernández le dio otro aire al juego ofensivo del Granada CF con su entrada. Carlos Fernández le dio otro aire al juego ofensivo del Granada CF con su entrada.

Carlos Fernández le dio otro aire al juego ofensivo del Granada CF con su entrada. / Carlos Gil

El equilibrio que ambas bandas otorgaban era el principal argumento de los locales, que siguieron dominando, aunque en el último cuarto de hora con menos peligro. De hecho, los de Mauricio Pellegrino se estiraron en la recta final y en el último minuto, ya sin Rubén Pérez en el campo por lesión, Braithwaite tuvo el empate tras rematar con la rodilla un saque de esquina cuando estaba en clara ventaja para fusilar a Rui Silva.

Mal arranque

Pero todo cambió tras el paso por los vestuarios. Pellegrino dio entrada al peligroso extremo José Arnáiz y con ello varió el sistema de juego. De una línea defensiva de cinco, pasó a un 4-2-3-1, con más presencia en campo contrario y eso lo notó en su fase ofensiva. En apenas seis minutos, los pepineros tuvieron dos llegadas al área de Rui Silva, que parece un témpano de hielo y no se inmuta. El mal arranque lo vio la grada, que levantó a su equipo con aplausos.

Hasta tres sistemas de juego empleó el Granada CF en el duelo, demostrando una gran riqueza táctica una jornada más

El Granada CF no estaba cómodo y Diego Martínez lo vio desde el banquillo. Dio entrada a Carlos Fernández por Ramón Azeez y también cambió el dibujo con el habitual 4-2-3-1. Una buena decisión pues, con el sevillano en el campo, los nazaríes tuvieron más posesión, aunque les costaba salir y generar peligro.

Los locales buscaban contras para asustar al Leganés, pero por momentos el duelo entró en una fase de ida y vuelta que no benefició a ninguno de los dos contendientes. Y más con el cansancio acumulado tras una semana muy intensa de partidos. El flujo atacante descendió considerablemente y, de hecho, desde el minuto 68 hasta el 89', apenas pasó nada reseñable sobre el terreno de juego. El que no pase nada durante más de 20 minutos se llama oficio, un aspecto que gana partidos como quedó demostrado. Entre cambios, atender a lesionados y la pausa de hidratación ante el calor que hizo ayer en Granada, los minutos fueron pasando.

Yangel Herrera cuajó un gran encuentro ante el Leganés. Yangel Herrera cuajó un gran encuentro ante el Leganés.

Yangel Herrera cuajó un gran encuentro ante el Leganés. / Carlos Gil

El tesoro conseguido había que defenderlo, y el míster vigués optó por variar de nuevo el sistema, dando entrada a José Antonio Martínez y actuar con tres centrales. Precisamente, el onubense fue el protagonista de una acción que el banquillo visitante reclamó como penalti por tocar el cuero con el brazo tras un centro lateral. Pero el VAR no dictaminó la pena máxima.

Fiesta

Fue la última acción destacada de un duelo que terminó con toda la grada rojiblanca insuflando ánimos a su equipo y coreando el nombre del técnico, que ya ha declarado que se siente muy querido en la ciudad, donde quiere echar raíces. El mundo del fútbol es muy cambiante, pero la unión que existe a día de hoy entre jugadores y afición hace tiempo que no se ve en esta entidad. Y esa dinámica hay que aprovecharla. La semana ha sido fantástica. Y el próximo sábado, a reivindicarse en el Bernabéu. Casi nada.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios