Las tarjetas, un problema que pasa desapercibido en el Granada

Las últimas jornadas no están sonriendo a los jugadores del Granada CF en lo que a amonestaciones se refiere, ya que los rojiblancos están recibiendo tarjetas amarillas y especialmente rojas con más o menos culpa que condicionan el resto del encuentro.

No se caracterizan los de Escribá por tener un juego agresivo o al límite como otros equipos que sin aprovechan más el factor físico, aunque si que tienen en sus filas al segundo jugador de toda la Segunda División que más veces ha sido amonestado: Loïc Williams con 11 tarjetas amarillas en 19 partidos.

El ex del Tenerife ha completado ya dos ciclos de amonestaciones, ausentándose obligatoriamente contra Levante en octubre y Huesca hace dos jornadas. Contra el Zaragoza recibió la primera del que sería el tercer ciclo. El zaguero valenciano es el segundo en este particular podio que lidera Musto (Cartagena) con 13 tarjetas, 12 amarillas y una roja, y completa Fali (Cádiz), con diez amarillas.

No se encuentra a otro jugador del Granada hasta la decimotercera posición, donde está Gonzalo Villar, que acumula siete amarillas y una roja directa (que vio el sábado ante el Real Zaragoza en una jugada fortuita que también pudo quedarse en amonestación leve) en 24 partidos. Es cierto que para su posición son demasiadas, teniendo en cuenta que es un constructor de juego y no un 'destructor' como Hongla o Sergio Ruiz, que acumulan menos amonestaciones: siete el camerunés y cuatro el cántabro.

El tercero en cuestión es precisamente Martin Hongla, que con seis amarillas y una roja ocupa el puesto 21 de los más amonestados de la Liga Hypermotion. El camerunés las ha recibido a lo largo de 21 partidos, y vio la roja contra el Eibar perdiéndose el siguiente compromiso contra el Burgos. Además de estos tres, los únicos que llegan a la barrera de las cinco tarjetas son Miguel Brau, Ricard y Miguel Rubio. El lateral catalán además fue sancionado con dos partidos por la roja que vio ante el Huesca por su rodillazo sin balón de por medio a Patrick Soko, que lo dejará ausente también contra el Córdoba la próxima jornada.

Las dos expulsiones restantes se dieron en el mismo partido y curiosamente también contra el Zaragoza, encuentros que se han visto salpicados por polémicas en diferentes ámbitos tanto en La Romareda como en Los Cármenes. Kamil Jozwiak fue expulsado de forma directa por quitarse de encima al portero Poussin con un braceo sobre el rostro tras coger el polaco el balón rápidamente tras un gol de Uzuni en una de las rojas más intentendibles de la temporada. El lateral Rubén Sánchez le siguió al poco tiempo, por una segunda amarilla tras hacer falta a Iván Calero, cuando llevaba escasos minutos sobre el verde.