Granada CF-Real Oviedo | Crónica y resultado

Ricard le da al Granada una nueva victoria in extremis en Los Cármenes ante el Oviedo

Los jugadores rojiblancos celebran el tanto de Ricard.

Los jugadores rojiblancos celebran el tanto de Ricard. / Fermín Rodríguez (Granada)

Un tanto de Ricard Sánchez en el minuto 89 de partido, le dio al Granada CF una sufridísima victoria ante el Real Oviedo (1-0) en un partido que sacó adelante a base de paciencia, aunque lo más justo hubiera sido un empate. Pero el fútbol no entiende de justicia sino de goles y fue el lateral diestro el que hizo explotar el Estadio Nuevo Los Cármenes a un minuto del final para dejar a su equipo en puestos de ascenso directo y mantener el casillero de derrotas en casa a cero.

Casi todos los partidos ante un equipo entrenado por Álvaro Cervera son rocosos, incómodos y con pocas ocasiones. Ante el Oviedo no fue una excepción. El rival, cuyo balance en la presente temporada era de dos derrotas, una en liga que le costó el puesto a Aitor Karanka, y otra en Copa del Rey, hizo que los rojiblancos tuvieran ganas de revancha ante los carbayones.

Espeso

Sin embargo, el conjunto de Paco López no fue el de otras citas en Los Cármenes. Cervera sorprendió quitándole el balón al Granada CF, que apenas inquietó en los primeros 45 minutos a Braat. A base de orden, con las líneas muy juntas y con criterio en el centro del campo, el Oviedo fue el dueño del partido. Aunque, eso sí, sin gozar de claras ocasiones de gol, algo también típico en los equipos del que fuera técnico del Cádiz.

El Oviedo dominó en la primera mitad gracias a su mayor posesión

El primer acercamiento de los locales llegó en el 8’ con un saque de esquina que no tuvo consecuencias. Fue de las pocas oportunidades que se pudieron ver. Con Famara Diédhiou en punta, su presencia condicionó mucho el juego rojiblanco. Al senegalés lo buscaron siempre a base de pelotazos para quitarse la presión que ejercieron los asturianos en la medular. En ese sentido, Melendo fue de los que más sufrió. El talentoso mediapunta arrancó partiendo en la derecha para buscar asociarse por dentro y dejar el carril a Ricard, al que casi nunca vieron.

Soluciones

Desde el banquillo se buscó que el catalán se sintiera cómodo sobre el verde, pero siempre estuvo muy vigilado. Es más, se dedicó a perseguir sombras y eso le restó frescura. Pero no fue el único. Bryan Zaragoza, una de las novedades en el once, comenzó en la izquierda pero en el ecuador del primer tiempo cambió su posición para actuar por la derecha. Todo ello llevó a que Famara estuviera desasistido, Bryan desaparecido, Melendo vigilado y Ricard desaprovechado. Encima, cuando el balón pasaba por las botas de Bodiger, la lentitud era la tónica dominante. Todo lo contrario que cuando el cuero lo tocaba Pol Lozano, pese a que estuvo más fallón de lo habitual con entregar peligrosas hacia atrás o el contrario.

Pol Lozano presiona a Borja Sánchez. Pol Lozano presiona a Borja Sánchez.

Pol Lozano presiona a Borja Sánchez. / Fermín Rodríguez (Granada)

Lo más destacado fue un disparo de Bryan desde la frontal tras recoger un rechace de la zaga visitante como consecuencia de un saque de esquina. Su chut lo repelió Braat, que tenía muchos jugadores por delante, y evitó males mayores. Ese fue el bagaje ofensivo de un equipo que quería seguir en puesto en ascenso directo en caso de ganar. Y claro, eso lo apreció la grada donde se instaló un runrún ante lo que estaban viendo los seguidores.

Entretanto, el Oviedo hizo su partido. Y a punto estuvo de salirle bien la jugada cuando, a cuatro minutos del descanso, Viti con un disparo cruzado llevó el uy al graderío. Dos ocasiones en 45 minutos, demasiado poco en un primer acto decepcionante y muy mejorable.

Cambios

Tras el paso por vestuarios, Paco López movió ficha. A su equipo le faltaba tener más posesión y optó por dar entrada a Antonio Puertas y Perea, dejando en la caseta a Famara y Bodiger, condicionado por la cartulina amarilla que vio a los tres minutos. El almeriense se situó en punta de lanza junto a Callejón y Perea en la izquierda. Pero la cosa, al menos en el arranque de la reanudación, no mejoró en exceso. De hecho, Borja Bastón, en el 51’ pudo hacer el 0-1 pero lo evitó Raúl Fernández y el rechace lo tiró fuera.

Los visitantes tuvieron dos ocasiones en la segunda mitad, entre ellos un lanzamiento al palo

Poco a poco, la afición rojiblanca comenzó a desesperarse. En el 53’ el Oviedo reclamó penalti por penalti de Víctor Díaz pero ni el colegiado ni el VAR estimaron punible. El Granada CF siguió muy espeso pero, con el paso de los minutos, los de Cervera dieron un paso atrás, dejaron de tener el balón y fueron los granadinistas los que dominaron. Hecho el trabajo de desgaste de Borja Bastón, Manu Vallejo entró para buscar hacer daño a la contra tras dejarle todo el campo a los locales y lo hizo.

Al palo

Entraron Soro y Víctor Meseguer. El maño por Callejón y el murciano por Melendo. Pero fue Manu Vallejo en el 70’ el que estrelló en el palo un centro de Viti. En caso de haber sido gol, la jugada tendría que haber sido revisada pues la posición del ariete era muy dudosa. La desesperación se instaló en Los Cármenes que vio a un equipo con pocos habituales como Soro, Perea o Meseguer en el eje.

A un cuarto de hora para el final, las sensaciones no eran las mejores. Se jugó mucho más en campo rival pero sin asustar a Braat. Demasiados previsibles, el portero ovetense detuvo sin problema un disparo de Puertas desde el vértice del área. En la siguiente acción Soro lo intentó y, posteriormente, de nuevo el ‘10’ rojiblanco. Con muy poco, Los Cármenes apretó en busca del tanto de la victoria.

Éxtasis

Y éste llegó a un minuto del tiempo reglamentario tras un saque de esquina botado por Perea que le llegó en la frontal a Ricard. El lateral controló el cuero solo, se la acomodó y chutó, rebotando el esférico en Sergi Enrich que despistó a Braat. La grada explotó como el día del Málaga. Y es que el Granada CF se ha especializado en sumar puntos en casa en la recta final. Lo hizo ante los malacitanos, la Ponferradina y frente al Oviedo. Y así de contentos que se fueron los aficionados rojiblancos a casa aunque a su equipo le costó mucho lograr los tres puntos. Por cierto, Los Cármenes siguen siendo un fortín invicto. Se sigue en ascenso directo y a dos puntos de la primera plaza.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios