El centrocampista francés Maxime Gonalons formó parte del once inicial de Diego Martínez en la vuelta del equipo rojiblanco a la competición liguera. El futbolista galo disputó 59 minutos, en los que pudo mostrar su oficio en tareas defensivas pero, en cambio,no pudo gozar de protagonismo cuando el equipo disfrutó de la posesión del esférico. Dejó, como siempre, destellos de su calidad. Se marchó del terreno de juego exhausto tras su entrega y con una tarjeta amarilla tras realizar una entrada tardía a un jugador del Getafe.

El centrocampista granadinista arrancó el encuentro con su habitual brega en la medular, pero con muy poco contacto con el balón. Con el paso de los minutos, Gonalons dejó algunos detalles técnicos e intentó tener más presencia en campo de la escuadra madrileña, pero tener espacio entre líneas era imposible con la telaraña tejida por José Bordalás.

Nada más arrancar el segundo tiempo el partido, Gonalons se animó a realizar una arrancada tras una recuperación de Yangel Herrera, pero el ‘4’ rojiblanco se estrelló con Timor y el colegiado, el catalán Medié Jiménez, le enseñó la cartulina amarilla.

El conjunto rojiblanco dio un paso adelante en los segundos 45 minutos y el futbolista galo trató de filtrar pases más verticales para los delanteros.

Cuando la hora de partido estaba a punto de cumplirse, Gonalons abandonó el terreno de juego y fue sustituido por Yan Eteki. El entrenador del Granada, Diego Martínez, decidió dar descanso a uno de los pulmones de su plantilla y, de paso, proteger al equipo de una posible expulsión por doble amonestación.Gonalons no protagonizó su mejor actuación como rojiblanco, pero su aportación en la medular siempre es valiosa.