Pacheta se agarra al ‘trivote’ para mejorar las prestaciones del Granada

Estamos a punto de meternos en octubre y da la sensación de que el Granada sigue en pretemporada. El técnico José Rojo ‘Pacheta’ no para de probar en busca del esquema adecuada, de los jugadores idóneos, del plan apropiado. Lo que se tenía que haber hecho en julio y agosto se está haciendo en otoño.

Los motivos son varios. Llegaron muchos jugadores en el tramo final del mercado estival, con varios partidos oficiales ya disputados. Y luego estuvo el problema con las inscripciones. Con todo, lo que ha incidido más en llegar a esta situación es el irregular rendimiento del equipo.

No ganar, apenas crear peligro, encajar un mínimo de dos goles en cada partido, ofrecer una tremenda sensación de flaqueza y vulnerabilidad en las dos áreas… el inicio de curso del Granada ha sido desastroso y Pacheta ha tenido que tocar teclas una y otra vez en busca de la armoniosa melodía.

Aún no la ha encontrado, aunque al menos en Burgos el equipo no desafinó tanto como en los choques anteriores. Sólo encajó un gol, que no es poco viniendo de donde venimos; fue capaz de ponerse por delante en el marcador, aunque la alegría sólo le duró seis minutos; y sumó su segundo empate del curso, que no es ganar pero tampoco es perder, que es lo que hizo en cuatro de las seis primeras jornadas.

Qué hizo Pacheta a nivel táctico diferente en El Plantío. La respuesta es clara: apostar por un centro del campo con tres medios, un ‘trivote’ que es la primera vez que lo usa en esta campaña y que mejoró las prestaciones del equipo en relación al pasado.

En los cinco primeros partidos siempre usó un doble pivote. Cambió lo de atrás, con defensa de tres centrales y dos carrileros o de cuatro en la zaga, y lo de adelante, con dos puntas natos o un enganche y un delantero, pero siempre con dos en la medular.

Ante el Burgos apostó por reforzar esa zona con tres en el medio. Fueron Rubén Alcaraz, Hongla y Alemañ, con el primero más de pivote fijo y los dos otros dos como volantes, aunque con mucho más recorrido y participación en el juego del ex del Valencia que del camerunés.

Sergio Ruiz se perdió el partido por un inoportuno problema gastrointestinal. De haber estado disponible seguro que hubiera sido de la partida. En la segunda mitad entraron Gagnidze y Trigueros para demostrar que Pacheta cuenta con los seis medios con los que cuenta en la plantilla. Acabó el Granada el partido con el mismo plan con el que lo empezó.

El aceptable resultado invita a pensar que el técnico repetirá experiencia en Huesca, donde el Granada juega el domingo a las nueve su segundo partido seguido como visitante, en el que busca su primera victoria del curso.

Con Sergio Ruiz seguramente ya recuperado, los rojiblancos visitarán El Alcoraz de nuevo con un trivote en su once inicial para tratar de consolidar su mejoría y de asentar esta manera de jugar.

El equipo dirigido por Pacheta se ejercitó el martes a primera hora de la mañana en la ciudad deportiva nada más regresar de Burgos y volvió a repetir sesión de trabajo este miércoles, ya a media mañana para comenzar a preparar el partido ante el Huesca.