A rey muerto, rey puesto. El Granada CF ha confirmado el sustituto de Pedro Morilla. Será David Tenorio, un técnico muy bien valorado por los dirigentes deportivos de la entidad que estaba desempeñando una función de entrenador auxiliar de Diego Martínez en la primera plantilla, función que ya no volverá a desempeñar con el objetivo de garantizar la permanencia en la categoría de un equipo que deberá afrontar ocho finales.

Tenorio tendrá como segundo entrenador a Roberto Cuerva, que no ha sido destituido y al que conoce a la perfección, que además podrá informarle y asesorarle de primera mano pues ha trabajado con Morilla con la plantilla del filial desde principio de temporada. El club, en un comunicado, señaló que “confía plenamente en su nuevo técnico que afronta con ilusión y trabajo este reto para la entidad”.

De la casa

El nuevo técnico del ‘Recre’ es un hombre de la casa que ha desempeñado distinta labores, entre ellas segundo técnico del Granada B hasta la pasada campaña, en la que acompañó a Morilla cuando el sevillano se hizo cargo del primer equipo tras el cese de José Luis Oltra.

Tenorio lleva varios años en la entidad rojiblanca.

Los malos resultados han podido con Pedro Morilla. El técnico del Recreativo Granada fue destituido por la dirección deportiva rojiblanca tras ver peligrar la continuidad del segundo equipo de la entidad en Segunda División B.

Demoledores

Tras comenzar la temporada a buen nivel y llegar a ocupar puestos de play off de ascenso durante cinco jornadas, la dinámica cada vez ha ido a peor, rozando los puestos de descenso a Tercera División pese a que en ningún momento ha estado en la zona roja. Pero los datos son demoledores. En las últimas catorce jornadas tan sólo había ganado un partido y su equipo marcado siete goles para sumar un total de siete puntos de 42.

La puntilla

La derrota el pasado domingo ante el Real Murcia supuso la puntilla para un técnico que ha hecho debutar a varios juveniles esta campaña y al que las lesiones le han impedido contar con un once tipo. Sin embargo, el juego del equipo, sobre todo en casa, no convencía y de hecho, tras el Atlético Malagueño, es el segundo peor equipo de la categoría como local, ganando tan sólo cuatro partidos de quince.