La Triple A aprovecha su momento en la portería del Granada

Ander Astralaga Aranguren, rebautizado por el Granada CF en sus redes sociales como la Triple A por las iniciales de su nombre y sus apellidos, se ha convertido por méritos propios en el protagonista de la semana en clave rojiblanca.

El portero del Granada disputó el pasado sábado en El Sardinero, su tercer partido oficial de la temporada, segundo en liga tras estrenarse en la derrota contra el Leganés, y fue clave para que los nazaríes pudieran sumar un meritorio empate (2-2) frente al Racing de Santander.

El plan, premeditado o no, le salió perfecto al Granada, que logró tener disponible a un portero de la primera plantilla para jugar con el equipo durante la ventana de partidos internacionales, a diferencia de lo que le ocurrió en octubre, cuando tuvo que actuar Iker García contra Las Palmas por estar Astralaga con la selección española sub 21 y Luca Zidane por Argelia.

En esta ocasión, las molestias en el tobillo arrastradas por Astralaga en las últimas semanas le libraron de la llamada de la selección. Luca Zidane sí que fue con Argelia, aunque se volvió sin jugar al arrastrar una lesión muscular que ahora le mantiene de baja con el Granada.

El alcance real de la dolencia del portero vasco sólo se sabe en el club. Lo cierto es que funcionó la estrategia, premeditada o no, y que Astralaga se quedó en Granada para poder jugar contra el Racing de Santander.

Se mantuvo toda la semana sin entrenar con el grupo y Pacheta confirmó, en la rueda de prensa anterior al partido, que iba a viajar pero sin asegurar si jugaría o no. Evidentemente, fue titular en El Sardinero.

No comenzó bien el partido, ni para él ni para el Granada, ya que recibió dos goles en la primera parte, naciendo el primero de ellos de un balón en largo del portero que Pascual controló mal en la medular.

Incluso, en algunos momentos dio la sensación de que estaba falto de forma, no al cien por cien en el aspecto físico, que no transmitía la seguridad necesaria que necesita mostrar el dueño de la portería.

Tras un resto de partido en el que apenas tuvo trabajo, el momento del encumbramiento llegó en el tiempo añadido, con dos sensacionales paradas en sendos mano a mano ante el racinguista Arana para evitar el que hubiera sido tanto de la derrota rojiblanca.

Demostró Astralaga seguridad y reflejos, celebrando con gestos explícitos las vitales paradas, tanto que Arana se rebotó y llegó a encararse con él naciendo ahí la trifulca entre jugadores de ambos equipos que se produzco al final del encuentro.

La citada lesión de Luca Zidane seguramente permita a Astralaga seguir como titular en los próximos partidos, empezando por el próximo del Estadio Nuevo Los Cármenes el sábado a las nueve de la noche contra el Córdoba.

La Triple A manda ahora en la portería del Granada tras ser el salvador de los suyos en El Sardinero. Tocado o no, con molestias o sin ellas, más o menos lesionados, hizo un esfuerzo para jugar contra el Racing, y lució. Es su momento.