La visita a La Victoria se convierte en un banco de pruebas para Pacheta

Los partidos amistosos y los trofeos veraniegos se suelen jugar en pretemporada y sirven de preparación para el posterior comienzo de los campeonatos de liga.

Una de las excepciones a la regla es el Trofeo del Olivo de Jaén, que llega en los albores del verano y con la competición ya iniciada. Será a las siete de la tarde de este jueves cuando Real Jaén y Granada CF se vean las caras en el Estadio La Victoria.

El duelo no pasaría de ser un amistoso más si no fuera por el desastroso inicio de curso de los rojiblancos, colistas de Segunda tras haber sumado sólo un punto en las cinco primeras jornadas.

Esto convierte el partido ante el Real Jaén, equipo de Segunda Federación, en un banco de pruebas para el técnico José Rojo ‘Pacheta’, que prepara con énfasis las dos próximas salidas a los feudos del Burgos y el Huesca, donde debe comenzar la reacción del plantel.

El principal problema que tiene el Granada en ese arranque de campeonato en la división de plata está en las porterías, porque encaja con extrema facilidad y le cuesta un mundo marcar.

El Granada es el segundo equipo menos goleador de la categoría. Sólo ha firmado cuatro dianas y el único que empeora sus datos es el Zaragoza, con tres tantos en cinco partidos.

Además, ha recibido en cinco jornadas doce goles, uno menos que el Albacete, que es el que más encaja con trece, y los mismos que el Ceuta y el Almería.

La diferencia entre los anotados y los recibidos por todos los equipos es mucho menor que en el caso del Granada, que con -8 lidera esta clasificación. Los siguientes son el Ceuta con -6 y el Albacete con -5.

El equipo rojiblanco es un flan en las áreas, tanto en la propia como en la ajena, y Pacheta trabaja para corregir el mal, porque la pretemporada y las cinco primeras jornadas han demostrado que lo actual no funciona.

Ya confirmó el resignado técnico en la rueda de prensa posterior al partido ante el Leganés que tienen que cambiar cosas para mejorar, que no les sirve lo que han hecho hasta ahora.

Cambiar la manera de presionar, defender con menos exposición, decidir si cerrar con tres centrales o con dos, corregir el posicionamiento defensivo de los laterales, poblar más la medular, ser más vertical en ataque, chutar más desde lejos, llegar con más efectivos al área… miente el que dice que en el fútbol está todo inventado.

Y se equivoca aquel que se agarra a un plan y no lo varía. El Granada es el vivo ejemplo de que es necesario un cambio para mejorar y evolucionar, y qué mejor escenario que un buen campo y un partido amistosos para probar.

El Granada se presentará en La Victoria con el alta de Diallo, que ya entrena con el grupo y estará disponible para volver al lateral izquierdo en Burgos tras faltar a los cuatro últimos partidos de liga al haber estado alrededor de un mes lesionado.

El galo ya trabajó al mismo ritmo que sus compañeros a finales de la pasada semana, pero era prematuro que jugara ante el Leganés. Con una semana más de carga en sus piernas podría reaparecer en El Plantío. Este jueves en Jaén se probará.

Los que no estarán en La Victoria son Álex Sola y Bouldini, que faltaron al entrenamiento grupal de este miércoles en la ciudad deportiva, en la que volvió el Granada al trabajo tras descansar el martes.

El primero acabó con molestias musculares el choque ante el Leganés y está entre algodones para poder llegar a Burgos, donde ya podría recuperar su posición en la derecha al recuperarse Diallo para el lateral zurdo.

Bouldini no pudo jugar ante los madrileños tras lesionarse en el partido anterior en Málaga. Su ausencia deja como único delantero del equipo a Jorge Pascual.