arte

Agua oculta

  • La nueva exposición en la Sala la Empírica muestra un completo recorrido por el imaginario artístico del cordobés Miguel Ángel Moreno

Agua oculta

Agua oculta

Todo cuanto se pueda decir de Miguel Ángel Moreno Carretero, el artista nacido en la localidad cordobesa de El Carpio, está emparentado con el nuevo concepto del arte, con las novedosas estrategias estructurales que conforman una creación abierta donde tienen cabida infinitas circunstancias siempre que estás estén sustentadas por un sentido, una verdad absoluta y, siempre, con una dimensión artística absoluta donde no cabe el menor resquicio para la duda.

La sala la Empírica, que nos ha demostrado su solvencia organizativa con un programa valiente y variado, presenta la obra de este artista del que, ya, vimos una extraordinaria muestra en La Madraza y que, ahora, se encuentra inmerso de lleno en el patrocinio de asuntos en esta Granada con muchas buenas y casi seguras promesas artísticas. Moreno Carretero lleva tiempo implicado en la creación de acciones conceptuales que hagan transitar los buenos argumentos de la idea por unos desarrollos formales que integren, sin resquicios, continentes y contenidos.

La exposición de la Sala de la calle Casillas del Prats nos oferta un completo recorrido por las obras que el artista del Carpio ha realizado con el agua como germen impulsor. El agua ese elemento consustancial con la espiritualidad de Granada, con sus sueños eternos de permanente lirismo, le sirve a Moreno Carretero para establecer su diversidad constitutiva con obras que anuncian las estructuras novedosas de un arte al que él imprime un aliento especial. Las piezas que se presentan en La Empírica forman parte de ese ideario artístico amplio de un autor para el que cualquier situación le vale para manifestar un desarrollo conceptual susceptible de crear emoción. Las obras no plantean exuberantes ni efectistas experimentaciones vacías o de escasos fundamentos; todas sus obras desentrañan formas que transmiten la realidad de una idea, su mero argumento conceptual. En este caso todo gira alrededor del agua, su determinante potestad y su amplio sentido.

A lo largo de su trayectoria el agua le ha hecho acondicionar su poderoso testamento plástico a una idea que él estructura con intensidad creativa; obras que abarcan todo el gran espectro artístico que encontramos en los planteamientos del arte moderno, con dibujos, esculturas, pinturas, fotografías e instalaciones y, además, en esta muestra, dos piezas nuevas realizadas específicamente para esta comparecencia granadina. En la primera, sobre una mesa se distribuye unas montañas negras que tienen su reflejo, también, en un mar negro que parece recordar ese mar muerto a causa de una contaminación. La pieza se presenta con un claro sentido efímero y su paulatina descomposición manifiesta una metáfora sobre la destrucción del paisaje.

La segunda pieza site specif, Generalife, se trata de un claro homenaje a Granada y a ese bello jardín mundialmente conocido, donde el agua encuentra un idílico escenario para desarrollar su mágico estamento sonoro. Esas cascadas de aguas que surcan los espacios alhambreños sobre un lecho cerámico son los mágicos espejos donde Moreno Carretero encontró la feliz imagen para una obra espléndida en fondo y forma.

De nuevo nos encontramos a un artista total; inmerso en todos los mejores planteamientos del arte nuevo, ese que debe mantener los caracteres verdaderos de una creación que postula infinitos desarrollos y desenlaces. Miguel Ángel Moreno Carretero es uno de los más ciertos y válidos artistas de la creación plástica actual y, como ya dije con motivo de su exposición en la Madraza, abanderado de una práctica artística española con carácter, diferente y comprometida.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios