El periodista y escritor Andrés Cárdenas ha presentado De Granada a Compostela, su último libro que lleva como subtítulo El libro del buen chumino, en un acto que se celebró este lunes en la Biblioteca de Andalucía. Durante la presentación, explicó que el libro recoge el cúmulo de experiencias vividas durante durante el recorrido que realizó entre Roncesvalles y Santiago de Compostela -el denominado Camino Francés- que tuvo que llevar a cabo en dos fases, pues cuando iba por la provincia de Burgos la aparición del coronavirus obligó, a él y a sus acompañantes (Antonio Castillo y Rafael Hernández, que presidieron el acto de presentación junto a Cárdenas) a abandonar el trayecto. El reto se pudo completar dos años después.

Durante la ceremonia de presentación, Cárdenas tiró de su habitual humor para explicar que del Camino hay tantos libros que él ha intentado "escribir algo diferente", tanto como plasmar la visión que del recorrido al lugar donde está la tumba de Santiago Apóstol puede hacer un granadino de Bailén. "He intentado granadinizar el Camino de Santiago", dice el autor, que al respecto añade que lo que ha pretendido es "sacar todas las referencias granadinas" que hay a lo largo del Camino.

Cárdenas firma uno de los ejemplares de su libro.

Cárdenas demuestra en De Granada a Compostela y en tono humorístico que la descripción de un pasaje o el retrato costumbrista de un lugar del Camino, "pueden convivir con un recuerdo personal, una anécdota divertida o una reflexión que invita a la búsqueda de uno mismo durante los ochocientos y pico de kilómetros que tiene el trayecto". El autor, que se define como "un peregrino que lleva a Granada y a Jaén siempre en su cabeza", encontró en las caminatas y conversaciones con otros peregrinos curiosas concomitancias de aquella parte de España con las provincias andaluzas de las que partió. El viaje lo hizo con otros amigos, también jubilados, que comparten su filosofía de que hay que saber sufrir en las largas caminatas, pero también regalarse el cuerpo con los pequeños placeres que ofrece la vida. "El Camino de Santiago es un como un libro, pero que hay que leer andando", concluye.

A la conclusión del acto, Andrés Cárdenas firmó y dedicó ejemplares del libre a muchas de la personas que asistieron a la presentación.