Rosalie Cangelosi ha tenido que esperar cuarenta años para hacer su sueño realidad y grabar el disco que habría gustado hacer con 20 años. En su álbum After 40 years, la cantante italo-norteamericana ha rescatado sus canciones preferidas de artistas como Billy Joel, los hermanos Gershwin, Irving Berlin, Frank Sinatra, Tony Bennett o Harold Arlen y de todos los grandes del jazz de los años 50 y las ha envuelto de una voz arrolladora que no da pistas acerca de su edad. "Desde muy niña soñaba con cantar. Siempre he estado en los coros de la parroquia, del instituto y de la Universidad y siempre he tenido la música como algo muy cercano, aunque hay ocasiones en las que apartas tu verdadera pasión sin saber muy bien por qué", explica la cantante.

Cangelosi grabó hace un año su álbum en el estudio de Fernando Romero en Granada sin ningún tipo de pretensiones, tan sólo por el mero hecho de cumplir una "satisfacción personal" que ahora no deja de sorprender a todos los que la escuchan. Pese a su timidez, esta noche subirá al escenario del Teatro Isabel la Católica para "transmitir" todo lo que le mueve por dentro: "No tengo la intención de copiar a nadie. Canto canciones que llevan muchos años formando parte de mi vida, que me traen muchísimos recuerdos y que siempre me han fascinado, pero desde todo lo que las tengo asimiladas en mi vida".

Interesada también en la bossa nova, la música brasileña, el tango y los boleros, Cangelosi estará acompañada en el escenario por Jaime Martínez (batería), Alfonso Barreiro (piano, teclados y acordeón), Alberto Ruiz (guitarra acústica y armónica), Nicolás Medina (bajo) y la colaboración especial de Arturo Cid.